Hace ya unos cuantos meses que, en pleno confinamiento por la crisis sanitaria del coronavirus, Bethesda lanzaba al mercado DOOM Eternal, un videojuego que busca continuar con la esencia clásica de DOOM recuperada por el videojuego de 2016. Ahora, Bethesda trata de llevar un paso más allá esta apuesta adaptándola a Nintendo Switch, una consola que pese a las obvias limitaciones técnicas ha demostrado en diversas ocasiones ser capaz de sorprender.
Después de los ports de obras como el DOOM de 2016 o Wolfenstein II, a la híbrida de Nintendo le toca ahora tirar de DOOM Eternal. ¿Lo conseguirá o se quedará a medias? Acompañadnos para descubrir qué es y cómo funciona DOOM Eternal en Nintendo Switch.
De vuelta al infierno
Antes de entrar a hablar del port a Nintendo Switch, merece la pena detenernos a analizar brevemente DOOM Eternal como videojuego en Nintendo Switch más allá del port y la obvia comparativa con el resto de plataformas. Lo primero que debemos tener claro es que DOOM Eternal, ya sea en Nintendo Switch, PlayStation 4, Xbox One o PC, es un gran videojuego.
DOOM Eternal recupera la esencia del DOOM clásico siguiendo la estela del DOOM de 2016 para presentar al jugador una mezcla explosiva que incluye uno de los mejores gunplay actuales, un apartado visual espectacular y mucha, mucha violencia. DOOM Eternalsigue siendo ese videojuego de corte clásico que centra toda su atención en ser el mejor shooter posible, sin derivar hacia otros géneros.
El diseño soberbio de los niveles de DOOM Eternal hace que pelear contra hordas de demonios sea casi como un baile. No solo importa la puntería, sino que importa fluir por el escenario, no quedarte parado y seguir dando brincos y vueltas para encontrar munición, salud, armadura y evitar ser golpeados. Seguir, en definitiva, bailando al son que DOOM Eternal marca.
Uno de los pocos peros que DOOM Eternal posee a nivel jugable es el de perder, en ciertos momentos, el rumbo. El juego intercala estas fases de acción desenfrenada con zonas centradas en el plataformeo. Si bien sirven para dar una pausa al ritmo frenético de la obra y un descanso al jugador, las fases de plataformas no terminan de encajar con la apuesta general. Se produce un cierto choque que, debido al alto nivel del resto del videojuego, se hace aún más palpable; como una nota disonante en un vals perfecto.
Más allá de esto, DOOM Eternal es capaz de aprovechar la historia (o la falta de la misma) de entregas anteriores para proponer una apuesta que, a nivel narrativo, resulta más interesante de lo esperado. Sin centrarse demasiado en contar una historia, el videojuego es capaz de explorar algunos detalles de su universo que, sin duda, agradarán a los fans más acérrimos sin hacer que la obra llegue a resultar pesada para aquellos que solo quieren pegar tiros.
Un port sobresaliente
Entrando a hablar del port de DOOM Eternal para Nintendo Switch, hay dos cosas que debemos tener muy claras desde el principio: la primera es que se trata de un port sobresaliente; la segunda, que esta es la peor versión posible de DOOM Eternal.
Es la peor versión posible porque para que Nintendo Switch pueda correr con una obra tan exigente como DOOM Eternal se han de realizar ciertas concesiones. La resolución dinámica cae hasta los 720p en la mayoría de ocasiones para mantener la tasa de imágenes por segundo estable, los joystick de los Joy-Con no son especialmente cómodos a la hora de apuntar en un shooter que requiere precisión y la calidad general de los gráficos sufre. Además, en modo portátil, el tamaño de los textos resulta ridículo, llegando a levantar dolor de cabeza.
Pese a ello, el port de DOOM Eternal es sobresaliente porque sabe sacar provecho de todos estos sacrificios. DOOM Eternal en Nintendo Switch funciona excepcionalmente bien. El juego es capaz de mantener los 30 frames por segundo de forma estable en casi todo momento, la falta de precisión se suple, en parte, con el control por giroscopio y en general, jugar, pese a todas las limitaciones, no resulta para nada incómodo.
DOOM Eternal en Nintendo Switch es, como bien decía, la peor manera de jugar al videojuego. Sin embargo, y esto es importante, sigue siendo posible jugar al videojuego. DOOM Eternal en Nintendo Switch es perfectamente jugable. La experiencia es peor que en el resto de plataformas pero sigue siendo realmente grata. DOOM Eternal en Nintendo Switch sigue siendo DOOM Eternal, y eso es una gran noticia.
Más adaptación y menos port
Una de las pocas cosas que puedo echarle en cara a esta versión de DOOM Eternal para Nintendo Switch es la de ser demasiado port y muy poco adaptación. Se trata de un port sobresaliente, sí, pero al fin y al cabo es solamente un port. Se está transportando el mismo videojuego a una plataforma en la que, por su naturaleza, se juega de una manera diferente.
Como comentaba anteriormente, hay menos precisión a la hora de apuntar, haciendo que el juego sea más complicado. Pero también nos encontramos con que Switch es una consola versátil, perfecta para partidas más cortas y, sobre todo, que se presta mucho al modo portátil. Esa es precisamente la ventaja de Switch y lo cierto es que DOOM Eternal no la aprovecha en absoluto.
Echo en falta que DOOM Eternal en Nintendo Switch sea más una adaptación que un port. Que los controles e incluso algunas mecánicas cambien de manera más radical, que el videojuego se adapte a la consola y no sea simplemente una demostración de fuerza técnica el poder hacer correr una bestia gráfica en la híbrida. En definitiva, echo de menos un trabajo que se acerque más al diseño y menos a lo técnico.
Conclusiones
DOOM Eternal sigue la estela del DOOM de 2016 y el port de la nueva entrega a Nintendo Switch sigue la estela del port del juego de 2016. Se trata de la peor manera posible de jugar a DOOM Eternal y eso es algo que resulta innegable. Pero, si Switch es vuestra única manera de jugar a DOOM Eternal, estad seguros de que podréis hacerlo sin problemas.
Con una tasa de framses por segundo muy estable y una calidad más que aceptable, DOOM Eternal vuelve a ser un port sobresaliente. Otro gran éxito de Panic Button con la híbrida de Nintendo que permitirá a los millones de jugadores de esta consola acceder a un videojuego que es toda una bestia gráfica de la pasada generación.
Si bien se echa en falta algún retoque para mejorar la jugabilidad y adaptar el juego (especialmente al modo portátil), a nivel técnico lo cierto es que la obra cumple con creces. DOOM Eternal en Nintendo Switch sigue siendo DOOM Eternal, y eso es algo que demuestra el buen hacer de Panic Button con laconsola híbrida.
Panic Button vuelve a firmar un port sobresaliente. DOOM Eternal llega a Nintendo Switch sin demasiadas adaptaciones y realizando muchas concesiones técnicas, pero el resultado es una experiencia que sigue siendo sólida y gratificante.
Jugabilidad
Historia
Gráficos
Rendimiento
DOOM Eternal es un gran videojuego a todos los niveles, independientemente de dónde lo juguemos
Pese a las concesiones técnicas, el juego no pierde un ápice de su esencia
La tasa de imágenes por segundo se mantiene muy estable
La experiencia de juego sigue siendo muy positiva
Otro trabajo soberbio de Panic Button con Nintendo Switch
Es la peor versión disponible de DOOM Eternal
El tamaño de los textos en modo portátil es ridículo
El control por giroscopio no acaba de suplir las carencias de los Joy-Con
Videojuerguista, lector y cinéfilo desde que tengo uso de razón. Hablo de videojuegos, cine, series o lo que me dejen. Incondicional del RPG clásico, lo indie y el wéstern. Me gustan los números y puedes encontrarme con una raqueta en la mano.
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