El controvertido negocio de Willyrex con NFT; ¿qué es y por qué es tan polémico?

La polémica ha vuelto a surgir en el mundo de los youtubers. Después del acalorado debate que se desataba semanas atrás acerca del pago de impuestos debido a la marcha de Elrubius a Andorra, hoy nos llega una nueva polémica que tiene a Willyrex y su nuevo negocio como protagonistas. Y es que este popular youtuber y streamer ha comenzado a vender NFT e incentivar la compra de dichos objetos entre sus seguidores. Pero es posible que os estéis preguntando qué son los NFT y por qué este negocio resulta tan controvertido.

Desde Areajugones hemos preparado un pequeño artículo en el que repasamos toda la situación, explicando de forma sencilla y detallada los pormenores de este negocio que ha hecho saltar las alarmas en redes. A continuación podéis ver todos los detalles de la nueva polémica en la que se ve envuelto Willyrex.

¿Cuál es el nuevo negocio de Willyrex?

Willyrex ha anunciado que dará comienzo a una colaboración con un artista para poner a la venta una serie de NFT (más adelante veremos qué son). Estos artículos, que han sido promocionados en las redes sociales del creador de contenido, llegarán al mercado en las próximas semanas.

Según ha confirmado el propio Willyrex, será una serie de 5 NFT realizados en colaboración con el artista Zigor Samaniego. El precio de estos variará desde 1 euro hasta los 2000 euros. Las unidades serán muy limitadas y estos NFT tan solo estarán disponibles para su compra durante 24 horas.

¿Qué son los NFT?

NFT es el acrónimo en inglés de "Non Fungible Token", que en castellano significa token no fungible. Se trata de algo así como un certificado de propiedad que un usuario puede comprar respecto a una imagen o un vídeo de Internet. La idea detrás de los NFT es que, al utilizar la tecnología blockchain (la misma que las criptomonedas) son muy seguros e imposibles de falsificar, registrando el autor de la obra, el propietario y las distintas transacciones que se han hecho con ellos.

Los NFT nacieron para darle valor a las obras digitales creadas en Internet y que, con el tiempo, cuando ganan en popularidad, se recrean y repiten por toda la web. Gracias a los NFT, siempre se puede saber quién es el autor original y el propietario actual de la obra en cuestión. Comprar NFT es, en cierto sentido, como comprar un cuadro o una obra de arte en la vida real.

La diferencia viene de que el NFT es un producto no solo digital sino virtual. El resto de usuarios de Internet pueden seguir teniendo acceso a esa obra que posees, por lo que el valor de lo que se paga no se encuentra en la obra sino en la propiedad de la misma (es decir, no es como comprar acceso a un fondo de pantalla que te gusta en una web concreta o a través de un artista). En este sentido, los NFT son más similares a objetos de coleccionista cuyo valor es simplemente ese (o el especulativo, cuando van variando sus precios y hay quien hace negocio con ello).

Ejemplos de NFT los encontramos dentro del mundo de los videojuegos cuando recurrimos, por ejemplo, a skins que se pueden comprar en mercados de terceros. Al adquirir una skin lo que hacemos es adquirir la propiedad de ese aspecto que podemos utilizar, o no, en nuestro personaje. Sin embargo, hay artistas que venden estos NFT fuera de cualquier juego y el valor es meramente de colección.

¿De dónde viene la polémica con Willyrex?

La polémica del nuevo negocio de Willyrex tiene dos capas diferentes:

Por un lado, el mercado de los NFT es algo que ya de por sí levanta discusiones en las redes. Se trata de un mercado en el que se negocia con productos virtuales (es decir, no hay un activo real detrás de las transacciones) y que, por su propia naturaleza, resulta altamente especulativo. Esto es algo que ya de por sí se ha ganado la enemistad de muchas personas que llegan a compararlo con las estafas piramidales (pese a que, legalmente, no se considera como tal). A ello se le suma que las comprobaciones de seguirdad que requieren los NFT cuentan con un altísimo gasto energético y, por tanto, tienen una importante repercusión sobre el medioambiente.

Sin embargo, la polémica tiene una segunda capa. Y es que Willyrex no solo está sacando provecho de este mercado especulativo (cosa que ya hace con la vivienda), sino que está utilizando su posición de influencia sobre millones de espectadores menores de edad para incitar a la compra de estos NFT con precios de hasta 2000 euros. El youtuber está, por tanto, haciendo uso de una posición privilegiada para llevar a cabo prácticas que, si bien entran dentro de la legalidad, son moralmente muy cuestionables.

Esto ha llevado a diversas figuras de Internet con mucha presencia en las redes a denunciar la situación (en algunos casos de forma irónica y con cierto humor y en otros alertando directamente a padres) para que los responsables de menores que puedan verse atráidos por este negocio tengan toda la información al respecto y estén alerta.