Si habéis leído mis críticas semanales de She-Hulk: Abogada Hulka, seguro que habéis notado que soy un firme defensor de esta comedia judicial de Marvel Studios. Pero tras seis capítulos, creo que he de decir lo que verdaderamente pienso: si bien me encanta Jennifer Walters y su intento de llevar una vida normal pese a ser la nueva Hulka, ha llegado el momento de que la serie de un giro de 180 grados y comience a ponerse seria en su recta final. Más aún cuando este sexto episodio sigue siendo más de lo mismo, y la fórmula empieza a cansar.
Atención: A partir de aquí, hablaré con spoilers sobre el capítulo 6 de She-Hulk: Abogada Hulka. No sigas leyendo si todavía no lo has visto.
Si nos remontamos a Bruja Escarlata y Visión, probablemente recuerdes que los primeros tres o cuatro capítulos tenían un enfoque completamente diferente a los restantes. Este giro en el tono es lo que funcionó con la mejor serie de Marvel Studios hasta la fecha, y eso que fue la primera. Un giro, por cierto, que debería haberse producido ya en She-Hulk: Abogada Hulka.
En lugar de eso, el sexto capítulo de la comedia protagonizada por Tatiana Maslany vuelve a profundizar en una anécdota del día a día de She-Hulk, y el propio personaje se burla de las expectativas que tenemos los espectadores: "sí, es el momento de un capítulo independiente". ¿Otro? ¿En serio Marvel? ¿Cuándo vamos a tener nuestra ración de UCM? ¿Por qué nos dejáis con ganas de más?
En este caso, vivimos la asistencia de Jennifer Walters a una boda como She-Hulk, algo que provoca el recelo de la novia al creer que le va a quitar todo el protagonismo. De nuevo se repite la fórmula de Hulka vs. el mundo, y como digo, empieza a cansar un poco. Sobre todo cuando llevas seis capítulos y NADA ha avanzado. Ni siquiera la nueva presencia de Titania aporta a una trama que parece estirada como un chicle.
Cómo habrás comprobado con She-Hulk: Abogada Hulka, además de la trama principal (que por ahora, es casi inexistente), siempre existe un caso judicial de trasfondo que suele aportar el toque más irreverente de la serie. Pero en este caso, la historia es aburridísima: un Inmortal que finge su suicidio para divorciarse de su mujer. Más allá de ampliar el lore del UCM, con la presencia de criaturas peculiares, no aporta absolutamente nada.
No puedo terminar esta crítica sin señalar el momento más decepcionante de She-Hulk: Abogada Hulka hasta la fecha: nos presentáis el casco de Daredevil en el capítulo 5, y en el sexto sigue sin aparecer el personaje. Lo esperaba en la escena post créditos, y se me ha quedado una cara... ¿En serio jugar tanto con las expectativas de los espectadores es inteligente, Marvel? ¿Habrá pelotazo final? Recuerda informarte sobre la fecha y hora del capítulo 7 de She-Hulk: Abogada Hulka si sigues montado en este barco.
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