Por fin ha llegado el momento de contar con la mejor versión que podemos tener en la actualidad de Final Fantasy VII: Rebirth, la continuación del Remake -que también cuenta con versión en compatibles- ya es una realidad para aquellos que no son usuarios de PlayStation 5. Square Enix sigue con su afán de llevar sus juegos a todas las plataformas posibles, incluidas versiones para Xbox Series X|S y Nintendo Switch 2 por el momento de forma hipotética.
Pero vamos a centrarnos en lo que tenemos en nuestras manos, llevo ya bastantes días jugando a Final Fantasy VII: Rebirth en PC en su versión de Steam gracias a Plaion y la verdad no puedo estar más contento y satisfecho de lo que ha conseguido hacer Square, alerta de spoiler estamos ante un port absolutamente excelente… ¿Puede mejorarse la perfección? Esta es la pregunta que nos hacíamos cuando Square Enix anunció la llegada de Rebirth a PC. Y la respuesta, para nuestra sorpresa, es un rotundo sí. Tras deslumbrar en PS5 y conseguir críticas excepcionales, esta nueva versión no solo mantiene el listón de calidad, sino que lo eleva gracias a una optimización ejemplar y unas posibilidades técnicas que harán las delicias de los jugadores de PC.
Lo más sorprendente es la inclusión de la verificación para Steam Deck la cual también he tenido la oportunidad de probar y de la cual no dejo de asombrarme -para bien- pues parece increíble que pueda estar disfrutando de esta maravilla de juego en una consola de mano. Por si te lo preguntabas, este análisis lo centro básicamente en el rendimiento del juego y en la experiencia del port a PC, si quieres saber mucho más del juego te recomiendo que eches un vistazo a nuestro análisiscompleto del juego en PlayStation 5.
Una experiencia técnica sobresaliente
La primera impresión al ejecutar Final Fantasy VII: Rebirth en PC, es decir, vale, bien, va fluido… Parece que el port es bueno, voy a toquetear un poco las opciones gráficas con mi RTX 4070, miro rendimiento y pienso, joder esto pinta muy, pero que muy bien aunque los 155 GB de la instalación pican bastante, pero es lo que hay si queremos unas transiciones tan limpias y rápidas como las que vimos en PS5… El juego es exigente, eso no lo puede negar nadie y va a requerir una buena máquina para que lo muevas a todo lo que da, pero Square Enix ha querido mimar aquellos que poseen compatibles con menos recursos y el resultado será más que satisfactorio para quienes cumplan, como poco, con los requisitos mínimos…
Durante más de 40 horas de pruebas con diferentes configuraciones he trasteado bastante y, en líneas generales, el rendimiento ha sido consistentemente sólido. Utilizando una RTX 4070, he conseguido mantener 60FPS bastante estables a 1440p con la configuración Ultra en prácticamente todos los escenarios, incluso los más llamativos y espectaculares como Gold Saucer. El DLSS hace un trabajo excepcional manteniendo la calidad visual mientras mejora significativamente el rendimiento sin apenas generar los temidos artefactos, una característica especialmente útil en las secuencias más exigentes como las batallas contra jefes o las escenas con efectos climáticos.
La ausencia de FSR me ha parecido bastante notable y en parte un tanto incomprensible, es cierto que el DLSS funciona bien, pero me parece casi obligatorio el poder contar con la alternativa por excelencia de AMD y poder ofrecer opciones de escalado de calidad para prácticamente cualquier configuración de hardware. La diferencia visual entre el escalado nativo y estas tecnologías es mínima, mientras que la ganancia en rendimiento puede ser sustancial, especialmente en tarjetas de la serie RTX 20.
La fantasía final de Steam Deck
La experiencia en Steam Deck es algo que sigo intentando asimilar, es sorprendentemente sólida, aunque requiere cierta planificación debido a sus 155 GB de espacio requerido. El juego viene con un perfil predeterminado específicamente optimizado para el hardware de Valve, tratando de mantener los 30 FPS estables con una mezcla inteligente de ajustes que prioriza la calidad visual en los elementos más importantes. Ínstalas y juegas, pero si no tienes la versión de Steam Deck de mínimo 256 GB vas a tener que preparar una bonita MicroSD para que quepa toda la fantasía en tu consola de mano.
Las texturas de personajes y efectos especiales se mantienen en calidad media, mientras que los efectos secundarios y la densidad de vegetación se reducen para mantener el rendimiento. El resultado es impresionante: las cinemáticas se reproducen sin problemas, los combates mantienen la fluidez, y la exploración del mundo abierto es perfectamente disfrutable. La batería dura aproximadamente 2.5 horas con estos ajustes, un resultado respetable dado el calibre técnico del juego, aunque esto dependerá de la calidad de vida que le quede a tu batería, que la deck ya tiene unos añitos y si sois como yo le habréis dado mucha caña enganchados...
Rendimiento y opciones gráficas
El menú de opciones gráficas es extraordinariamente simple y completo, ofreciendo un control granular sobre cada aspecto visual del juego. Desde ajustes básicos como la resolución y la tasa de refresco hasta opciones avanzadas de sombreado y cantidad de personajes adicionales por pantalla, cada parámetro está claramente explicado y muestra su impacto en el rendimiento.
Los tres perfiles predefinidos (Alto, Medio y Bajo) funcionan sorprendentemente bien como punto de partida para empezar a trastear hasta que des con la combinación que mejor se ajuste a tus preferencias. En nuestras pruebas, incluso el perfil bajo mantiene una calidad visual notable, sacrificando principalmente efectos secundarios y densidad de objetos a distancia.
La implementación del control en PC merece especial atención, la respuesta es inmediata, sin el input lag que a veces encontramos en conversiones de consola, y las combinaciones de teclas para habilidades y menús están distribuidas de manera lógica. El soporte para mandos es igualmente sobresaliente, con reconocimiento automático para controladores de Xbox, PlayStation y Switch Pro y un largo etcétera. La retroalimentación háptica se mantiene en el DualSense cuando se conecta por cable, aunque con menor intensidad que en PS5. Los menús se adaptan automáticamente mostrando los botones correspondientes a cada tipo de mando y el control en general bajo cualquier periférico es sencillamente sobresaliente.
El mundo abierto puesto a prueba
La exploración del vasto mundo de Rebirth se beneficia enormemente del hardware PC. Los tiempos de carga al atravesar diferentes regiones son prácticamente instantáneos con un SSD NVMe, y el streaming de texturas y objetos es algo más fluido que en PS5. La distancia de dibujado o calidad del fondo se puede extender significativamente en configuraciones potentes, eliminando bastante el pop-in que ocasionalmente veíamos en consola.
Las zonas densamente pobladas como Gold Saucer o las calles de Junon mantienen un rendimiento estable, incluso con docenas de NPCs en pantalla. El sistema de física mejorado en PC se nota especialmente en estas áreas, con mejor interacción entre personajes y elementos del entorno. La iluminación dinámica y los efectos atmosféricos alcanzan nuevos niveles de calidad, especialmente notables durante efectos climáticos.
Sistema de combate: fluidez y espectacularidad
El sistema de combate se beneficia enormemente de las tasas de refresco variables en PC. Los encuentros mantienen una fluidez constante incluso en las situaciones más caóticas, con efectos de partículas y animaciones que lucen especialmente espectaculares a altas frecuencias de actualización. La precisión del control, tanto con mando como con teclado/ratón, hace que las mecánicas de contraataque y bloqueo sean más satisfactorias que nunca.
Las invocaciones y límites, tradicionalmente exigentes a nivel gráfico, mantienen el rendimiento sin sacrificar calidad visual. Los efectos volumétricos y el sistema de partículas mejorado hacen que estas secuencias sean verdaderamente impresionantes, especialmente en configuraciones que permiten ray tracing a resolución nativa.
Conclusiones
Final Fantasy VII: Rebirth en PC es mucho más que una simple conversión: es una reinterpretación técnica que aprovecha al máximo las capacidades de la plataforma. La optimización ejemplar, las numerosas opciones de personalización y el sorprendente rendimiento en Steam Deck nos deja con un port excepcional y un gran trabajo de Square Enix por hacer llegar esta obra de arte a todos los jugadores posibles.
Además, os recuerdo que, con motivo del lanzamiento, podéis hacer con el Twin Pack que incluye tanto Final Fantasy VII: Remake, como Final Fantasy VII: Rebirth a un precio absolutamente competitivo de 62,99 € en lugar de los 89,99 € que pasará a costar tras esta promoción, yo si fuera tú no lo pensaría demasiado, pues estamos ante una oportunidad excepcional.
Final Fantasy VII: Rebirth en PC es mucho más que una simple conversión: es una reinterpretación técnica que aprovecha al máximo las capacidades de la plataforma. La optimización ejemplar, las numerosas opciones de personalización y el sorprendente rendimiento en Steam Deck nos deja con un port excepcional y un gran trabajo de Square Enix por hacer llegar esta obra de arte a todos los jugadores posibles.
Apartado gráfico
Apartado sonoro
Apartado jugable
Apartado artístico
Escalabilidad técnica sobresaliente
Opciones gráficas para todos los equipos
Soberbia compatibilidad con Steam Deck
Rendimiento técnico impecable
Es la mejor versión para disfrutar del juego
Los 155GB pesan demasiado para Steam Deck
El trazado de rayos podría haberse explotado un poco más
Ingeniero de Telecomunicaciones. amante de SEGA y todo lo que tenga que ver con Sonic. Nintendero por bandera y Game Pass en el corazón. Muy fan de Halo y las sagas Gears of War o Forza. Siempre con mi Steam Deck en la mochila...