Teniendo en cuenta que lo visitamos en varias ocasiones al día, es muy probable que hayas hecho uso del inodoro y nunca te hayas hecho preguntas sobre por qué funciona como lo hace o cuál es el motivo que existe detrás de algunos aspectos característicos de este elemento indispensable en nuestras vidas. Y, precisamente, en esta ocasión quiero contaros el por qué de que casi todos los inodoros del mundo sean de color blanco.
La cosa es que esta tonalidad cromática no es algo que se haya elegido de forma arbitraria, sino que existe una explicación científica detrás que tiene mucho más sentido de lo que parece, según recogían los compañeros de IFLScience. Por ello, os dejo con los motivos a continuación para que no os perdáis nada al respecto.
El hecho de que los inodoros sean de color blanco tiene que ver con el material con el que se suelen fabricar, el cual se corresponde con uno que recibe el nombre de porcelana vitrificada. En este sentido, se trata de un material muy poco poroso que cuenta con una ventaja crucial con respecto a otros: es muy fácil de limpiar. Por tanto, se suele utilizar este tipo de porcelana con el objetivo de que no se acumulen muchas bacterias y microorganismos en el inodoro, cosa que es inevitable por la función que cumple en sí mismo.
No obstante, existe una segunda sustancia que es la principal responsable de que los inodoros sean blancos: el óxido de titanio, el cual se aplica a la propia porcelana en el momento de su fabricación. Esto se debe a que se trata de una sustancia muy resistente al desgaste contra líquidos, suciedad y otro tipo de materiales, haciendo que sea la mejor opción posible para este tipo de porcelanas. De hecho, el óxido de titanio cuenta con una composición química que es la responsable de dar esa pigmentación blanca tan característica de los inodoros.
La otra razón evidente por la que los inodoros son de color blanco y que no tiene que ver con la ciencia sino con la práctica está relacionada con que la suciedad es mucho más fácil de detectar en este tipo de tonalidades, haciendo que seas consciente de que debes limpiarlo en el momento en el que se mancha y así no se generen microorganismos no deseados sobre su superficie. Algo que es sencillo de entender en cuanto piensas en el caso contrario: si el inodoro fuera de color negro, sería mucho más difícil darte cuenta de si está sucio o no.
Además de esto, hay que tener en cuenta que el color blanco se encuentra frecuentemente asociado a entornos sanitarios como, por ejemplo, los hospitales, por lo que también se suele escoger con el objetivo de darle a nuestro baño una cierta sensación de higiene (cuando está limpio claro). Sea como sea, ¿qué os ha parecido esta explicación? ¿Sabíais de antes por qué los inodoros son de color blanco? Os leo en los comentarios.
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