He visto Karakai Jouzu no Takagi-san, y mi 'adorablímetro' ha reventado

Durante la semana pasada escribí sobre el anuncio de la película y la tercera temporada de "Karakai Jouzu no Takagi-san", y como en muchas ocasiones me pasa con cosas que no he visto, me entró un irrefrenable deseo de ver el anime, que no lo cogí en emisión en su momento. Es así que me sumergí en Crunchyroll y Netflix para verme las dos primeras temporadas, y creo que es de las mejores decisiones a nivel anime que he tomado en mucho tiempo.

Una lección de cómo hacer un slife-of-life de romance y comedia sin caer en lo vulgar

He visto muchos slice-of-life de comedia y romance en mi vida y sí, obviamente algunos como "Kimi no Todoke" o "Your Lie in April" que recuerde no necesitan en ningún momento de caer en lo sexual o vulgar para ser tremendamente adictivos. "Karakai Jouzu no Takagi-san" no es pionero en esto, pero sí que es el primer anime en mucho tiempo que me recuerda lo especiales que son estos animes puramente adorables.

Obviamente, "Karakai Jouzu no Takagi-san" parte con la ventaja de que, si no me equivoco, sus personajes tienen entre 12 y 13 años, por lo que aunque empiezan a estar en el terreno de gustar a alguien seriamente son completamente inexpertos en el romance, y este supone una barrera que se expresa genial a través de Nishikata. Al igual que he visto a gente desesperada con un personaje como Takemichi en "Tokyo Revengers" porque es 'lento' y le cuesta entrar en acción, con Nishikata jamás puedes desesperate porque realmente entiendes por lo que está pasando el personaje.

Creo que de lo que más me ha gustado de "Karakai Jouzu no Takagi-san" he de destacar que realmente puedes sentir esa empatía por un primer amor real y de las formas de expresarlo y vivirlo. Takagi es, realmente, la más obvia de los dos, pero no a los ojos de Nishikata, que se ciega voluntariamente por la irrefrenable vergüenza que le causa cualquier mínima discusión amorosa. Es, en esencia, la historia de un primer amor que se vive de la forma más pura posible, y que no ha parado de sacarme sonrisa tras sonrisa.

Si tuviera que resumir así, en una serie de puntos, lo más positivo que he visto en el anime creo que quedaría de la siguiente forma:

• Las bromas realmente son divertidas, aunque lo más divertido es la confianza de Nishikata previa a sus derrotas.
• Los pocos flashbacks están muy bien introducidos, y te dan el contexto necesario en el momento adecuado para entender una situación o broma.
• Ves una progresión super natural y orgánica en la relación de ambos personajes, pasando de las bromas en clase a las bromas de camino a casa, a las bromas quedando en un parque, a las bromas en la biblioteca/casa y, hasta la segunda temporada, bromas en el primer festival al que van juntos.
• Los personajes secundarios realmente amenizan y te dan un cambio de ritmo interesante para que no haya nunca una 'sobredosis' de Nishikata-Takagi; esto de hecho me lleva al siguiente punto...

Los secundarios de oro

Dejando a un lado que me ha encantado la dinámica entre Takagi y Nishikata, con todas las bromas y los 'te gusto o no te gusto' de la edad, he de decir que en este anime hay también un par de personajes secundarios que me han parecido de oro. En particular, estoy hablando de no otros que Mina y Kimura; quiero un spin-off con estos dos 'personajes' en toda regla.

Con Mina me lo he pasado genial la verdad, toda una niña en el sentido más puro de la palabra que tiene desde las reacciones más adorables hasta las más estúpidas que uno pueda pensar (además, es 'tocaya' de cejas con mi persona). Pero si he de poner a un nombre sobre todo en el pódium es el de Kimura, que pese a que no tiene excesivo tiempo en pantalla me parece espectacular.

Lo primero que pensé en ver a este personaje fue 'es 'Gegant' de Doraemon (lo vi en catalán) pero habiendo repetido curso unas 47 veces'. Es decir, me parece que el trío Nishikata, Kimura y Takao está fuertemente inspirado en el 'Nobita, Takeshi, Suneo' de "Doraemon", pero con su propio girito. En el caso de Kimura en lugar de rozar lo 'bully' resulta que es una persona que acaba siendo tan sensible como amplio es su apetito.

Sí, me reí mucho con Kimura porque el tío es un espectáculo; desde los kanji (creo que eran) que convierte en culos en la pizarra hasta la foto de culo o codo que le manda a 'Nishikata', desde luego alguien avanzado a su época. Pero lo mejor es que cuando era necesaria la sensibilidad para entender un momento 'Takagi-Nishikata' el tío la tenía, y de hecho al final de la segunda temporada es gracisa a él que Nishikata consigue reencontrarse con Takagi en el festival. Desde luego, no todos los superhéroes llevan capa, pero tampoco han de tener músculos de acero.

Esperando la tercera temporada de Karakai Jouzu no Takagi-san con MUCHAS GANAS

Solo me queda decir que estoy 'adentrísimo' con el equipo "Karakai Jouzu no Takagi-san". Creo que hace a la perfección todo lo que realmente puede necesitar una historia simple de romance y comedia, y tengo muchas ganas de ver qué implica la película que se estrenará también en 2022. Me haya subido o no al barco en la recta final, la verdad que estoy muy contento de haberle dado una oportunidad al anime.