Jujutsu Kaisen y su polémico final: ¿Estamos ante uno de los peores desenlaces en un shonen?

Seis años después de su debut en la revista Weekly Shonen Jump, el manga de Jujutsu Kaisen se despidió oficialmente con su capítulo 271. Con más de 100 millones de copias en circulación, esta obra se convirtió en uno de los shonen más exitosos de la última década. Sus personajes carismáticos, su trama original y su innovador sistema de poder cautivaron a lectores de todo el mundo, sin embargo el final de Jujutsu Kaisen no fue bien recibido por gran parte de la comunidad.

Muchos fans manifestaron su enorme descontento con la forma en la que Akutami-sensei decidió poner punto y final a la trama. Y no son pocos lo que consideran que estamos ante uno de los peores desenlaces de un manga shonen de éxito.

Una recta final apresurada y que deja cabos sueltos

Si bien con Attack on Titan me tocó ir contracorriente y defender su desenlace a capa y espada, con Jujutsu Kaisen no puedo hacer otra cosa que unirme a sus detractores. Las dos primeras temporadas del anime me animaron a ponerme al día con el manga para saber cómo proseguía la historia de Itadori y compañía después del Incidente de Shibuya. Desde entonces, seguí la obra semana a semana hasta la llegada del capítulo 271.

El último arco argumental, la "Batalla Siniestra de Shinjuku", me transmitía constantemente la sensación de que el autor quería terminar su obra de una vez (probablemente porque ya estaba quemado). De pronto comenzaron a sucederse giros de guion loquísimos de forma consecutiva que apenas tuvieron justificación alguna.

De pronto nos dicen que el padre de Yuji era la reencarnación del hermano gemelo de Sukuna, Kenjaku muere dejando caer que aún tiene un plan entre bambalinas (nunca se llega a saber el qué), Uraume asegura que Sukuna no está mostrando su verdadera fuerza (¿Se supone que nunca llegó a mostrarla?), Nobara resulta estar viva (no se explica por qué se mantuvo en secreto), Megumi recupera sus ganas de vivir de un capítulo a otro... La lista se alarga bastante.

Todos estos giros narrativos carecen de la construcción cuidadosa que había en los primeros arcos del manga. Se sienten como volantazos creados para hacer que abras la boca de la sorpresa, pero una vez lo piensas detenidamente, te das cuenta de que no terminan de estar justificados.

El final de Jujutsu Kaisen también destaca por dejar múltiples cabos sueltos que, al menos de momento, no se abordarán en una precuela/secuela del manga. Nunca llegamos a entender del todo las motivaciones de Sukuna como villano porque apenas se supo nada de su vida en la era Heian. Y Uraume es un personaje que así como se presentó, continúa siendo un completo misterio y apenas aportó algo a la trama (ni siquiera vimos su pelea contra Hakari). Que el autor no haya incluido un flashback sobre los orígenes de su antagonista principal es incomprensible.

En general, el ritmo vertiginoso del arco final afectó en gran medida a los arcos de desarrollo de muchos personajes como Megumi. En lugar de cierres a la altura lo que recibimos fueron resoluciones rápidas y poco satisfactorias.

Para colmo, el epílogo de la obra siembra todavía más dudas al dejar varios frentes abiertos y ofrece numerosas escenas irrelevantes. A falta de 3 capítulos para el final de Jujutsu Kaisen, en vez de cerrar como es debido la historia de los personajes principales, Akutami dedicó varias páginas a despedir a supervivientes del Culling Game con los que no tenemos ningún tipo de conexión emocional y a presentarnos una insulsa misión final para el trío protagonista.

Teniendo en cuenta todo esto creo que Gege Akutami terminó quemado con Jujutsu Kaisen y quiso ponerle fin lo más rápido posible. Esto es algo que le sucede a muchos guionistas, mismamente los showrunners de Juego de Tronos experimentaron eso mismo antes de preparar la temporada final de la serie, por lo que no resulta tan sorprendente.

Además es importante señalar unas declaraciones realizadas por el propio autor tiempo atrás. A Akutami-sensei siempre le encantó la forma en la que Nasu Kinoko (creador de Fate) se salta "la explicación de la trama" para construirla exclusivamente en torno al entretenimiento. Considera fascinante que los propio lectores busquen explicaciones por su cuenta cuando no entiendan la historia, y eso es justo lo que hemos tenido que hacer con Jujutsu Kaisen. Todo cobra sentido.

Con este artículo pretendo explicar, el líneas generales, por qué el final de Jujutsu Kaisen me pareció apresurado y decepcionante a partes iguales. Dicho esto creo que es una obra que tiene grandes virtudes, como sus increíbles combates o los diseños de muchos de sus personajes. ¿Qué opináis vosotros?, ¿Estáis de acuerdo conmigo?