David S. F. Wilson dirigirá la adaptación de Influx, una novela de ciencia ficción

Bloodshot, que se estrenó en marzo, fue el primer trabajo de Wilson como director

Publicado: 16 Abril 2020, 13:08
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En marzo se estrenaba "Bloodshot" en la que David S.F. Wilson, debutaba como director. Protagonizada por Vin Diesel, forma parte de la saga de comics Valiant, creados en 1992. Pese al contexto de su estreno ha conseguido buenos resultados. La salida de la película coincidió con la crisis del coronavirus, cosa que obligó a la productora lanzar la cinta también en alquiler en plataformas digitales, para intentar compensar la recaudación.

Todo esto no ha detenido a Wilson, que ya ha puesto en marcha su creatividad con un nuevo proyecto y es que Sony Pictures, según ha confirmado el Hollywood Reporter, ha adquirido los derechos de la novela "Influx", escrita por Daniel Suárez y ganadora de un Premio Prometeo. La productora le ha encargado a Wilson la dirección de esta cinta y de cuya adaptación se está ocupando Zak Olkewicz. En el equipo de producción también encontramos a Todd Black, Steve Tisch, Jason Blumenthal y Tony Shaw.

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INFLUX. Dream come true. I’ve wanted to adapt this book since the moment I read it, six years ago now, right about the time I met @itsDanielSuarez — thank you @chr1sa. Beyond excited to be back at @SonyPictures doing this with @ZOlkewicz & @EAfilms
— Dave Wilson (@DavidSFWilson) April 14, 2020

Este director novel, que se abrió camino en la industria a través de los efectos especiales, siempre ha tenido una gran afición por las novelas de ciencia ficción y uno de sus sueños ha sido poder llevar estas historias a la gran pantalla, de hecho, ha revelado en una entrevista para Deadline que esto ha supuesto un gran impacto en su trabajo. Esto podría suponer que Wilson sea la persona idónea para sacar adelante esta historia sci-fi y cuya emoción ha plasmado en su cuenta de Twitter.

La novela fue publicada en 2014 y centra su historia en un físico de partículas llamado Jon Grady el cual ha inventado un dispositivo que es capaz de reflejar la gravedad. Pese a ser uno de los mayores avances de la física moderna, la institución para la cuál trabaja se niega a mostrar al mundo los avances y progresos tecnológicos cerrando el laboratorio en el que se encuentra Grady y convirtiéndolo es una especie de cárcel futurista de la que el científico deberá escapar trabajando en equipo con el resto de reclusos y así poder salvar el futuro de la humanidad. Esperamos conocer más detalles en los próximos meses.