No me escondo cuando digo que Metal Gear Solid es una de mis sagas favoritas y que he jugado a absolutamente todas las entregas principales (y algunos spin-offs, a excepción de Metal Gear Solid: Portable Ops y Metal Gear Rising). Y eso incluye las primeras entregas que no todos han jugado, las de MSX2. En aquella época, plena década de los 80, la saga eliminaba el "Solid" de su nombre y sólo se llamaba "Metal Gear". Ni Konami ni Kojima se imaginaban en qué se iba a acabar convirtiendo esa franquicia.
Kojima ya apuntaba maneras desde muy joven, siendo muy ambicioso, ingenioso, resolutivo y con ideas muy revolucionarias. Lo demostró con cada juego que ha desarrollado, y ya lo dejó ver con el primer Metal Gear de todos. Muchos creen que es un desarrollador sobrevalorado, pero yo soy de los que piensan que es todo un genio (a veces incomprendido, pero un genio). Y os voy a contar una anécdota del primer título que demuestra lo ingenioso que podía llegar a ser.
Corría el año 1986. Una joven Konami fichó a un joven Hideo Kojima con la idea de desarrollar un nuevo título de la empresa japonesa para un ordenador muy popular en Japón en aquella época, la MSX2. El concepto original de muchos juegos son diferentes a lo que acaban siendo, y con el primer Metal Gear ocurrió eso mismo.
En un principio, el juego no iba a ser de sigilo. De hecho, era descrito como un título de acción militar. Se inició pensando y basándose en las películas de guerra de la época y en juegos muy populares de los 90 como Commando. Por lo que se buscaba mucha acción y escenas con muchos tiroteos y donde se eliminasen muchos enemigos rápidamente. Sin embargo, había un gran problema que impedía esto.
MSX2 era un ordenador con una potencia muy limitada incluso para la época. Existían otras plataformas con más potencia en aquellos años, como la propia NES. El problema que tenía MSX2 es que no permitía hacer un juego de acción con tanta facilidad ya que no había forma de poner muchos sprites en pantalla y que el rendimiento no cayese. Esto supuso un problema para la idea inicial que tuvo Kojima para el juego de acción.
Así que lo que decidieron es cambiar directamente el enfoque del juego. A Kojima se le ocurrió cambiar directamente el género de su título en lugar de limitarse a usar los pocos recursos que permitían la plataforma. Aprovechó lo poco que podía hacer para crear un juego de sigilo donde el objetivo es intentar pasar inadvertido y no entrar en grandes batallas. Así se le dio también la narrativa perfecta al título: Solid Snake debía infiltrarse en una base enemiga sin ser detectado. Así fue cómo la saga se convirtió en una saga de sigilo, algo que en un principio nunca iba a ser así. Así que podemos agradecerle la existencia de la saga Metal Gear Solid como la conocemos a la pobre potencia de MSX2. Porque efectivamente, se creó un género.
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