El cine y la ficción televisiva del norte de Europa cada vez es más visible en nuestro país: El Puente o Borgen son algunas de las series que han llegado a España y que han gozado de gran éxito entre los espectadores más críticos. Por ello, no es de extrañar que crezca el interés ante productos de países como Dinamarca o Suecia, siendo este último el que ha creado Califato, uno de los últimos estrenos de Netflix que podría convertirse en un pequeño hit durante las próximas semanas como ha ocurrido con Unorthodox (de origen alemán).
Califato es una ficción muy interesante por varios motivos: el primero, es que la crítica respalda a esta producción creada por Wilhelm Behrman y Nickolas Reckström, apuntando varios medios al hecho de que nos encontramos ante una serie con un ritmo endiablado y que sabe bucear con ingenio en las profundidades del Estado Islámico.
En IMDb, una de las aplicaciones esenciales a la hora de comprobar el respaldo del público a la industria audiovisual, vemos cómo Califato obtiene ya una media de 8,1 con más de 3.000 votos (los mismos que lleva, por ejemplo, Toy Boy actualmente, el último éxito de Netflix).
Su sinopsis es escueta, y quizás no profundiza en uno de los elementos más distintivos de su trama: es de las pocas producciones televisivas que se atreve en ofrecer luz sobre el Estado Islámico: "la agente Fatima recibe un soplo de que habrá un atentado terrorista planeado en Suecia. Al mismo tiempo, la joven Sulle descubre un nuevo mundo gracias a su asistente estudiantil".
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