Siempre he pensado en la franquicia de Super Mario Party como un bolsillo al que echar la mano cuando necesitas pensar en regalos de cumpleaños para tus amigos, pero nunca he tenido tanto apego con la misma como para comprarme una de sus entregas para mi uso personal. Algo que me hace ser un hipócrita en todas esas situaciones en las que convenzo a alguien para ir a su casa a probar cada nuevo juego que sale de la misma.
Quizás sea por la misma naturaleza de la misma y por su incompatibilidad con mi manera de jugar. Al fin y al cabo siempre he disfrutado más de los videojuegos en solitario que de aquellos que se plantean para ser jugados en compañía. Sin embargo, Super Mario Party Jamboree ha cambiado este mismo paradigma en las dos últimas semanas que he estado jugándolo para preparar este análisis: es la primera vez que tengo un Super Mario Party en mi estantería, y tengo muchas cosas que decir sobre él.
Más minijuegos, más personajes, más de todo
Prácticamente todos los minijuegos de Super Mario Party Jamboree son totalmente nuevos dentro de la franquicia. Esto sienta unas bases con respecto a lo que esta entrega pretende ser: una cantidad ingente de novedades que se añaden a lo que siempre ha estado ahí. En este mismo sentido, la variación con respecto a la estructura jugable básica del título es la misma, pero es que tampoco necesita cambiarla en ningún sentido.
Los modos tradicionales ofrecen aquello a lo que siempre hemos estado acostumbrados, lo cual nos deja con una primera conclusión temprana sobre el juego: Super Mario Party Jamboree es igual en cuanto al continente, pero nuevo con respecto al contenido. Los tableros son únicos de este nuevo capítulo de la saga, los 120 minijuegos son inéditos en su mayoría, hay una decena de personajes jugables que están disponibles aquí por primera vez, modalidades que pretenden que nos enfrentemos (o colaboremos) con nuestros amigos de maneras nunca antes vistas...
Es cierto que hay ciertos minijuegos mejores y otros peores en cuanto a ofrecer ese click cerebral desde el que se desencadena el proceso neuronal que asocia el concepto de diversión a lo que estemos haciendo. Incluso puede que algunos modos se queden a medio camino de lo que pretenden conseguir, pero hay tantos contenidos nuevos que todo esto se diluye en un amplio océano de agua recién filtrada cuyas olas acarician costas a las que llegaréis por primera vez con Super Mario Party Jamboree.
Todos los modos de juego disponibles en Super Mario Party Jamboree
Sabiendo que sería una auténtica locura enumerar los 120 minijuegos nuevos que hay en el juego, lo mejor que puedo hacer es concretar una lista de aquellas estructuras más grandes que se encargan de distribuirlos de diferentes formas en función de lo que busquemos a la hora de jugar. O, dicho de otra manera, cuáles son y en qué consisten los diferentes modos del juego:
Modo Mario Party: se trata del modo tradicional donde jugaremos en diferentes tableros y nos moveremos según las puntuaciones de unos dados para caer en casillas con diferentes efectos
Puerto de Minijuegos: esta es la vertiente en la que podremos participar en sets de minijuegos que cambian de manera diaria y donde podremos elegir a cuál de ellos jugamos de manera libre. Además, cuenta con una serie de desafíos competitivos con una tabla de clasificación y otros sets de minijuegos con reglas adicionales
Modo Bowseratlón: este modo es uno de los más originales de todo el juego. Básicamente, consiste en una carrera contra otros jugadores en la que iremos avanzando al conseguir puntos dentro de los minijuegos aleatorios que vayan saliendo en pantalla, convirtiéndose así en algo como una especie de battle royale de Super Mario Party
Brigada Anti-Bowser: este es el modo cooperativo por excelencia del juego. Nuestra misión aquí es trabajar de manera conjunta con otros jugadores para derrotar a un Bowser gigante en una gran prueba cooperativa en la que irán apareciendo minijuegos de manera aleatoria
En alas de la aventura: se trata de un minijuego especialmente pensado para utilizar el sensor de movimiento de la consola, dado que tendremos que recorrer un circuito utilizando un ala-delta que controlaremos con nuestros propios brazos
Fábrica de Toad: este modo podría considerarse como una especie de vertiente en la que iremos progresando en diferentes minijuegos temáticos que nos mostrarán cómo los Toads crean los objetos míticos de Super Mario dentro de una fábrica
Cocina Rítmica: esta vertiente está compuesta por una serie de minijuegos especiales centrados en mecánicas de ritmo
Quizás los modos que más destacaría por encima del resto tienen que ver con el de Bowseratlón y la Brigada Anti-Bowser por aquello de que ofrecen una experiencia que se aleja de aquello a lo que siempre hemos estado acostumbrados en Super Mario Party. Lo malo es que algunos de ellos proponen ideas que no terminan desarrollando del todo y se acaban quedando cortos como, por ejemplo, En alas de la Aventura. Por otro lado, la vertiente de los tableros sigue funcionando como un tiro en cuanto a ritmo y variedad de las situaciones que se presentan en pantalla con cada tirada de dados que hagas, por no hablar de su nueva mecánica de los Jamboree.
Esta última consiste, esencialmente, en que cada ciertas tiradas aparecerá un personaje en el tablero que podremos reclutar para que nos otorgue una ventaja especial. Lo bueno es que, al caer en su casilla, se activará un minijuego especial de todos contra todos para que cualquiera tenga la opción de convertirse en su compañero.
Esta nueva entrega que es presente y futuro de Nintendo
Esta nueva entrega de Super Mario Party es una prueba más de que Nintendo está muy atenta al presente y al futuro de las tendencias de su público potencial. Sobre todo, porque se nota que se han llevado a cabo cambios en el ritmo al que tienen lugar las acciones que se llevan a cabo, por ejemplo, en el modo tradicional. De esta manera, todo ocurre de forma más acelerada, sin parones innecesarios o lapsos de tiempo que nos permitan derivar nuestra atención a cualquier otra cosa que no sea el juego como tal.
Otro ejemplo de esto tiene que ver con haber adaptado la fórmula de la franquicia a una estructura diferente para poder incluir un modo battle royale dentro del juego; una tendencia que la gran N ha ido siguiendo de cerca desde hace un par de años con algunos de sus lanzamientos más recientes. Estas intenciones dejan una muy buena huella en la propuesta actual de Super Mario Party Jamboree, dado que logran hacer que el juego se sienta fresco a pesar de ser la enésima entrega de una saga muy conocida. De esta manera, es evidente que Nintendo es consciente de que la franquicia necesitaba algunos giros inesperados, pero llevados a cabo de tal forma que no se trastocara una fórmula que sigue funcionando como un tiro.
Conclusión
Si alguna vez has pensado en comprar un juego de la saga Super Mario Party para tenerlo a mano en casa y animar reuniones con amigos y familia, esta es la señal que necesitabas para hacerlo. Sobre todo, porque Super Mario Party Jamboree no solo está pensado para ser disfrutado por varias personas a la vez dentro de una misma habitación, sino para ocupar aquellos breves ratos de tiempo libre que tengas entre tareas y distraerte en solitario gracias a sus modos alternativos pensados para ello.
En resumen, Super Mario Party Jamboree es la prueba de que el refrán que dice ''menos es más'', tiene también sus propias excepciones. Con una cantidad de contenido nuevo abrumadora, es un juego cuyo objetivo principal es el de agarrarte de la pechera y sacarte a tirones de la densa rutina cotidiana. Super Mario Party Jamboree es el mismo propósito para el que fueron creados los videojuegos en su esencia más pura; un reflejo de que lo más importante es conectar con otras personas... de eso ha ido siempre toda esta movida.
Con una cantidad de contenido nuevo abrumadora, Super Mario Party Jamboree promete convertirse en uno de los juegos más ambiciosos de la franquicia. Además, es un título que modifica con sumo respeto la esencia misma de la saga con el objetivo de expandir sus propios límites y ofrecer experiencias jugables nunca antes vistas en la misma; cumpliendo así con lo que cualquiera podría esperar de un Super Mario Party en pleno 2024.
Jugabilidad
Variedad de los modos
Minijuegos nuevos
Cantidad de contenido
Casi todos los minijuegos son totalmente nuevos
La cantidad de contenido inédito es abrumadora
La variedad de las pruebas es más grande que nunca
Algunos tableros del modo principal son realmente originales
Algunos modos del juego no tienen tanto potencial como parece
Crecí rodeado de naturaleza y campos de trigo, pero con la cabeza llena de historias sobre dragones y planetas lejanos. Después me hice psicólogo para poder fascinarme con las historias de los demás.
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