En el momento en el que supimos que las mentes maestras detrás de Persona 3, Persona 4 y Persona 5 estaban desarrollando un nuevo juego, sabíamos que iba a ser muy grande. Porque con cada título se han superado, siendo la quinta entrega de la mencionada saga uno de los mejores JRPGs de toda la historia, considerado por sus fans. Sin embargo, este nuevo título no es Persona 6, sino algo totalmente diferente y, a la vez, muy parecido. Se llama Metaphor: ReFantazio.
A pesar de lo extremadamente fan que soy de la saga Persona y de las ganas que tengo de que saquen una sexta entrega, son precisamente las diferencias y novedades que introduce Metaphor: ReFantazio sus mayores encantos. Pero como digo, todos los que hayáis jugado a Persona encontraréis todos los pilares fundamentales de esa franquicia en esta nueva IP. Voy a aprovechar que ya lo he jugado para explicaros eso mismo que os he comentado en detalle.
De Don Nadie al mismísimo Rey
Como en cada análisis, voy a ir por bloques, y comenzar con la historia es casi obligatorio con Metaphor: ReFantazio. No sólo porque sea excelente, sino porque sirve para dar todo el contexto a nivel de ambientación que tiene esta obra. Obviamente, no haré ningún spoiler y sólo mencionaré detalles ya sabidos o muy vagos de la trama.
Ambientación
Nos encontramos en Eucronia, un reino compuesto por varias naciones, cada una con su lore y ambientaciones diferentes, y donde hay varias razas de personas, algunas más comunes que otras. Todas ellas se caracterizan por algo físico, y los que no tienen ninguna de esas particularidades que diferencian a unas razas de otras pertenecen a la raza elda, que es la raza del protagonista. Algunas razas son totalmente discriminadas por la mayoría de la ciudadanía, especialmente las que no abundan, mientras que otras son las que, por unas razones u otras, tienen más facilidad para formar parte de la sociedad sin problema o incluso conseguir altos puestos en el gobierno y la realeza.
Todo ello, como sabéis, se desarrolla en un mundo fantástico donde, además de las razas, hay monstruos, magia y demás términos únicamente aceptados en la realidad de las ficciones. No hay prácticamente ningún ápice de futurismo aquí, sino que, aunque es un mundo fantástico que se aleja por completo a nuestra realidad, se podría decir que se inspira en el medievo.
Historia
Sin mencionar mucho más sobre el lore, que es algo que pienso que tenéis que ir descubriendo vosotros mientras jugáis, la historia consiste en que el Rey muere asesinado y no hay un sucesor, por lo que varios candidatos luchan por demostrar al pueblo que son dignos de sentarse en el trono. El grupo protagonista lucha por ello no porque quieran ser reyes, sino porque el príncipe heredero sigue vivo pero muy enfermo debido a una maldición, y pretenden encontrar la forma de eliminar dicha maldición y, a la vez, que él se convierta en el rey.
Esto es la trama base muy a grosso modo. Sin embargo, ya sabéis que en los juegos de Persona siempre hay mil millones de matices y, más importante aún, varios arcos que abarcan a cada uno de los villanos a los que te enfrentas y cada uno de los problemas que les toca resolver a los protagonistas. En Metaphor: ReFantazio no iba a ser menos, y es que cada 10 o 15 horas de juego de media hay un arco nuevo donde, aunque la historia principal continúe, los protagonistas se centran en nuevos personajes y una nueva historia.
Y es que todas las historias son excelentes, tanto la principal como las de cada arco. Y no sólo porque la trama en sí sea muy buena, sino porque el guion es simplemente magnífico por todos los giros argumentales que hay. A cada rato estás tan sorprendido como los protagonistas por todos los acontecimientos, y eso es lo que te mantiene enganchado al juego de principio a fin. Y como pasa con Persona 5, bajo mi punto de vista, Metaphor: ReFantazio no tiene nada de relleno. En definitiva, la historia es lo mejor del juego. Una trama como sólo Atlus sabe hacerla, una historia que sea capaz de hacerte reír y llorar en cuestión de pocos minutos.
¿Combate por turnos o acción en tiempo real?
Aunque Metaphor: ReFantazio sea una combinación de ambos, principalmente es combate por turnos. Sin embargo, cuando estás explorando una mazmorra o una zona que tenga enemigos, puedes atacar sin entrar en combate. De hecho, tienes incluso combos y hasta una mecánica de esquiva. Esto sirve para desestabilizar a los enemigos y entrar con ventaja en combate o incluso para derrotarlos sin combatir, en caso de que sean mucho más débiles que tú.
Pero donde está toda la miga de la jugabilidad de este juego, al menos en lo que a acción se refiere, es en el combate por turnos. Y es que hay varias mecánicas que puedes utilizar en las batallas: ataque físico normal (que será de tajo, perforador o de golpe, dependiendo del arma que lleves equipada), defensa, pasar turno, usar objetos y usar tu Arquetipo para usar habilidades o usar Síntesis.
Aquí es donde entra el pilar más fundamental de la jugabilidad en combate de Metaphor: ReFantazio. Los Arquetipos son manifestaciones heroicas que podemos invocar (bueno, realmente los personajes se convierten en ellos) y con los que usar habilidades. Y hay habilidades de todo tipo, tanto mágicas como físicas, así como todopoderosas, o aquellas que suben o bajan estadísticas o las que curan o infringen estados alterados (igual que en Shin Megami Tensei y en Persona). Esas habilidades las van aprendiendo a medida que los subes de nivel. Y es que los Arquetipos tienen un nivel independiente al del personaje.
Sin embargo, aquí hay una diferencia con respecto a la saga Persona. En dicha franquicia, cada personaje tiene a su Persona, a excepción del protagonista que puede tener varias e invocar a quien quiera en combate. Aquí todos los personajes sólo tienen un Arquetipo, pero todos ellos pueden llevar equipado el que tú quieras. Es un sistema muy similar al sistema de trabajos de Bravely Default. Cambiar de un Arquetipo a otro cambia las habilidades disponibles, ya que dependen del Arquetipo, el equipamiento que puedes llevar y, por supuesto, las estadísticas. Los personajes tienen unas estadísticas base, pero las estadísticas finales siempre vienen marcadas por los Arquetipos.
Los Arquetipos le dan un plus de estrategia a los combates brutal, ya que puedes cambiarlos en cualquier momento en el menú del juego. Y hay un buen montón de Arquetipos muy distintos entre sí que vas descubriendo a medida que avanzas en el juego o creas vínculos con personajes, es decir, los conviertes en tus seguidores. Pero de esa parte hablaré luego. El caso es que puedes jugar con los Arquetipos a equiparte antes de cada combate difícil. Aunque por supuesto, si le equipas un Arquetipo a un personaje que todavía no lo tiene entrenado, tendrá muy pocas habilidades y quizá no te sea tan útil.
Y es que la sensación de progreso con los Arquetipos es muy adictiva. No, en este juego no hay fusiones como en Persona, sino que consigues versiones mejoradas de los Arquetipos disponibles una vez alcanzas el máximo nivel de maestría con ellos para un personaje, o avanzando en los vínculos con tus seguidores, o con la historia. Pero ir desbloqueando nuevos Arquetipos te abre aún más posibilidades a la hora de combinarlos y crear nuevos equipos, hasta tener una infinidad de opciones cuando ya tienes el juego muy avanzado.
Y dependiendo de los Arquetipos que haya equipados en el equipo y cómo de avanzados estén, hay movimientos de síntesis. Las síntesis son habilidades especiales que gastan dos turnos pero que son muy poderosas, pues combinan el poder de dos Arquetipos. Y también hay una barbaridad de habilidades de síntesis que vas descubriendo a medida que haces combinaciones de Arquetipos en el equipo. Como digo, las posibilidades son infinitas y esto hace que puedas jugar al juego casi como quieras, siempre y cuando conozcas las debilidades de los enemigos y sus puntos fuertes.
Casi se me olvida hablar de la magla, que no magia, aunque se parece. La magla es como una moneda, aunque no es una moneda como tal, que podemos gastar para estudiar los Arquetipos, es decir, para equipar nuevos Arquetipos al personaje. Los Arquetipos también pueden heredar habilidades de otros Arquetipos que ya haya equipado el personaje, y estudiar esas habilidades también consume MAG.
De simulador de estudiante a simulador de candidato a Rey
No pueden faltar las características que hacen tan especiales a los juegos de Persona. Aquí hay de nuevo un calendario, es decir, hay tiempo que va avanzando con cada actividad que realizas. Como en Persona 5, hay cinco estadísticas que debes subir para ir completando ciertos contenidos secundarios del juego. En Metaphor: ReFantazio son elocuencia, imaginación, valor, tolerancia y sabiduría. Y la mayor parte del tiempo libre que tengas y que no estés explorando mazmorras estarás intentando subir esas cinco estadísticas con una gran cantidad de actividades que hay en las ciudades.
De la misma forma, el tiempo pasa mientras viajas en el surcador acorazado, el vehículo que usarás para moverte por Eucronia, por lo que también tienes que tener en cuenta eso, aunque tienes actividades dentro del surcador. Lo bueno es que las ciudades que ya hayas visitado podrás volver sin que pase el tiempo gracias a una mecánica que descubriréis dentro del juego y que no comentaré aquí porque puede considerarse spoiler.
Pero el segundo pilar fundamental de Metaphor: ReFantazio junto al combate, al igual que en Persona, son los vínculos sociales. Aquí se llaman seguidores, ya que son personas que te apoyan como candidato a rey. Y es que de la misma forma que en Persona, creas vínculos con diferentes personajes del juego y que puedes quedar con ellos para reforzar esos vínculos. Reforzarlos te sirve para ganar habilidades pasivas (menor coste de MAG a la hora de estudiar ciertos Arquetipos, poder cocinar sin que pase el tiempo, objetos más baratos en las tiendas, etc) y para conocer nuevos Arquetipos.
Pero creo que lo mejor de pasar tiempo con tus seguidores es conocer sus historias. Aquí es donde quiero aprovechar para hablar de los personajes y lo tan carismáticos que son. Con cada juego que han desarrollado desde Persona 3, han perfeccionado la historia y guion de cada personaje, y en Metaphor: ReFantazio eso se nota. Los personajes son brutales, tanto los protagonistas como los seguidores. E incluso los villanos o aquellos que no son aliados tuyos como tal son impresionantes. Y eso implica a nivel de personalidad como a nivel artístico, de lo que hablaré a continuación.
Un estilo sólo a la altura de Atlus
Esto engloba lo que es la banda sonora y el estilo artístico tanto a nivel de diseño gráfico como diseño de personajes y mundo. Y es que la banda sonora es una absoluta obra maestra, aunque reconozco que aquí me decanto más por el carisma que desprenden los juegos de Persona, no teniendo tantísima personalidad la música de Metaphor: ReFantazio. De hecho, pienso que la música de este juego no es tan fácil de recordar como sí lo son las canciones de los combates de los juegos de Persona. Aun así, la banda sonora es excelente.
Y qué decir del estilo artístico. Desde que se lo curraron tanto con Persona 5, Atlus ya no quiere sacar un juego que no alcance ese listón. Ocurrió con Persona 3 Reload que a nivel de diseño gráfico era extraordinario, y pasa también con Metaphor: ReFantazio. El propio logo del juego ya es una declaración de intenciones, pero que se ve aún más claro cuando vemos los bocadillos de diálogo y, por supuesto, la interfaz gráfica durante el juego y en los menús, que es toda una pasada.
De la misma forma, el diseño de los personajes es toda una pasada, y muy fácilmente recordables, tanto los principales como los villanos. Sin embargo, sí creo que el diseño de las mazmorras es un paso atrás respecto a Persona 5. Aunque tampoco tendría sentido que hubiesen tenido diseños como los de las mazmorras de Persona 5, que eran temáticos pero con sentido. Aun así, por los motivos que sean, las mazmorras aquí sí pueden hacerse un poquito más pesadas que en P5.
Conclusiones
Sé que con muchos análisis me quedo con una sensación de haber dejado mil cosas en el tintero, pero con Metaphor: ReFantazio siento que ni eso, como si en realidad no os hubiese contado nada del juego. Y es que en cierta manera os he explicado la base del título y por qué me gusta tanto, pero lo que realmente va a hacer que os enganchéis es su historia y sus personajes, y de eso no quiero hablar en profundidad porque cada detalle que descubráis por vuestra cuenta os gustará saberlo de esa forma y no leyéndolo en un análisis.
En definitiva, es difícil trasladar todo lo que es capaz de hacer sentir un juego sólo con palabras imprentas en una pantalla, pero sí os puedo decir que Atlus ha vuelto a sentar precedentes y que si Persona 5 os pareció una obra maestra, Metaphor: ReFantazio está, como MÍNIMO, a la misma altura.
Metaphor: ReFantazio bebe mucho de lo aprendido con Persona 5, y eso sólo puede ser bueno. Es una evolución más del género JRPG tanto en lo jugable como en lo artístico, un juego que vuelve a sentar cátedra dentro de dicho estilo, y que por si fuese poco, consigue atrapar al jugador y sumergirlo en su universo con gran facilidad gracias a sus personajes excelentemente bien escritos y una trama que engancha desde el minuto uno.
Historia
Estilo artístico
Jugabilidad
Banda sonora
Contenido secundario
La historia es impresionante
Personajes altamente carismáticos
Pese a ser combate por turnos, es muy dinámico y fresco
La banda sonora es una joya
Puede hacerse repetitivo en el combate, como la mayoría de los JRPGs
Duración: 100 horas
Jugadores: 1 jugador
Idiomas: Voces en inglés/japonés, textos en español
Responsable de videojuegos. Jugador enamorado de Persona, Zelda, Super Mario y juegos gachas, pero también me veréis escribiendo sobre PS Plus, ofertas y muchos más juegos.