Dragon Ball Sparking Zero nos trae lo mejor del estilo de Akira Toriyama en toda su gloria, pero también nos reta a encontrar la configuración perfecta en nuestros PC para aprovechar cada detalle sin sufrir ralentizaciones. Y aunque el juego sea exclusivo de consolas de última generación y PC, no significa que cualquier ordenador pueda moverlo sin sudar un poco. Aquí vamos a desmenuzar cada ajuste y darte los mejores trucos para que disfrutes de un rendimiento óptimo, ya sea en 1080p o en 1440p a 60 FPS.
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No es un secreto que el Unreal Engine 5 puede ser una bestia demandante, y aunque Dragon Ball Sparking Zero no es tan exigente como otros títulos en este motor, como Silent Hill 2 Remake o Black Myth Wukong, su demanda en la GPU es notable. Además, el juego carece de un paso de compilación de shaders, lo que puede provocar tirones en el rendimiento la primera vez que lo juegas o cuando se introducen nuevos efectos. La buena noticia es que una vez que los shaders están cargados, estos problemas disminuyen considerablemente.
Si tienes una RTX 2060 o superior (idealmente con 8 GB de VRAM), podrás jugar en configuraciones bastante altas, pero si tu objetivo es alcanzar los 60 FPS de manera estable, aquí te doy los ajustes óptimos.
A continuación, te dejo una tabla con los ajustes recomendados para que obtengas el mejor rendimiento sin sacrificar mucho en calidad visual:
Ajuste | Configuración Recomendada |
---|---|
Escala de Resolución | 100 |
V-Sync | Activado |
Calidad de Anti-Aliasing | Alta |
Calidad de Sombras | Media |
Calidad de Texturas | Alta |
Calidad de Post-procesado | Media |
Calidad de Efectos | Media |
Profundidad de Campo | Alta |
Calidad de LOD | Alta |
Calidad de la Hierba | Alta |
Calidad del Motion Blur | Desactivado |
Movimiento de Cámara | Desactivado |
Calidad de Efectos de Destrucción | Alta |
Si bien muchos prefieren desactivar el V-Sync para evitar el retraso de entrada (input lag), en este caso es recomendable dejarlo activado para mantener una experiencia fluida. Si tienes un monitor Freesync o G-Sync, evita el V-Sync del juego y utiliza el de tu monitor para reducir posibles tirones.
Calidad de Texturas en alta es fundamental si quieres apreciar todo el detalle de los personajes y escenarios, pero ten en cuenta que el juego puede exceder los 7 GB de VRAM en 1440p, así que ajusta esto según tu tarjeta gráfica. Por otro lado, bajar la Calidad de Sombras a media puede liberar recursos sin afectar mucho la calidad visual, especialmente en las peleas rápidas.
Para evitar dientes de sierra y darle suavidad a los contornos, deja el Anti-Aliasing en alta. Con el Postprocesado en media puedes reducir la carga de tu GPU sin perder ese toque de brillo que le da profundidad al juego.
Como mencioné antes, Dragon Ball Sparking Zero utiliza el motor Unreal Engine 5, que, aunque impresionante, es famoso por ser bastante pesado en rendimiento gráfico. En este caso, el diseño visual espectacular gracias al estilo de Akira Toriyama y el uso intensivo de efectos de partículas y postprocesado hacen que la GPU tenga que trabajar extra.
A diferencia de otros juegos que también usan UE5, este título no es tan demandante en CPU, lo cual es un respiro. Con un procesador de 6 núcleos moderno, deberías ir bien. En cambio, si tienes una GPU con menos de 6 GB de VRAM, quizá debas considerar jugar en 1080p o activar la escala de resolución dinámica para mantener los fotogramas estables.
Es posible que experimentes unos cuantos tirones cuando abras el juego por primera vez o tras una actualización de drivers. Esto es debido a la falta de compilación de shaders, que suele ser un inconveniente en los juegos que usan UE5. La recomendación es que aguantes esos primeros minutos, ya que una vez que los shaders están listos, el rendimiento mejora considerablemente.
La realidad es que para sacar el máximo provecho a Dragon Ball Sparking Zero, necesitas un equipo decente, sobre todo en el apartado de GPU. Si bien no requiere lo último en tecnología, jugar en configuraciones ultra en 1440p o más puede ser un reto para GPU con menos de 8 GB de VRAM. Si tienes una tarjeta gráfica como una RTX 3060 o superior, estarás bien para jugar con gran calidad, siempre y cuando ajustes algunos parámetros.
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