Después del revuelo que surgió el año pasado cuando Sony desestimó la posibilidad de cruzar las partidas de Fortnite en su plataforma con las de las compañías rivales de Microsoft y Nintendo, los responsables de PlayStation 4 tuvieron que reconsiderar la decisión y traer el juego cruzado a sus usuarios.
Hasta la fecha, tan sólo unos pocos juegos de PlayStation 4, entre ellos Fornite o Rocket League, tienen soporte cross-play con otras plataformas. Y aunque Sony insista en que se trata de una decisión de los propios estudios de desarrollo para implementar en sus próximos títulos que aparecerán en la consola, ya son varios los desarrolladores que han rechazado esta afirmación como cierta, ya que al parecer Sony estaría dificultando el juego cruzado con otras consolas del mercado.
Cualquiera que sea el caso, una cosa sí que es cierta: Sony ha estado reticente con las posibilidades de juego cruzado en su consola y muchos lo han criticado por ello. Sin embargo, desde una perspectiva empresarial esta decisión cobra mayor sentido, y realmente no se puede culpar a Sony de no querer compartir la cancha de juego de con otros jugadores, o al menos esto es lo que sugiere un desarrollador
Dave Bars, fundador de BARS Studios una nueva compañía europea que se encuentra actualmente en el desarrollo de cuatro títulos diferentes, opina que aunque mientras él comprende la decisión de Sony en relación al crossplay, otros jugadores se pueden frustrar y tienen derecho a ello.
"Hay múltiples razones por las que escoges una consola frente a otra" dijo Bars para el medio digital Gaming Bolt. "Juegos exclusivos, simpatía hacia la marca etc. Pero existe también una gran razón de peso, que quizás sea la más importante; si todos tus amigos están jugando en la consola 'xy', cuando tú decidas comprar otra consola diferente a ellos, estás decidiendo no poder jugar con tus amigos" señala el desarrollador.
"'Me voy a comprar una PlayStation porque todos mis amigos juegan en PlayStation' es la razón principal que afecta directamente al impacto de las ventas. No tiene sentido para Sony renunciar a eso, ya que sus ventas son significativamente más altas que las de Xbox. Así que desde una perspectiva gamer es algo decepcionante, porque todo el mundo quiere elegir su consola favorita y ser capaces de jugar con sus amigos a través de las diferentes plataformas. Pero desde una pespectiva empresarial el punto de vista de Sony es comprensible" explica detalladamente Dave Bars.
Será en la próxima generación de consolas cuando comprobemos si Sony se verá obligada a aumentar el catálogo de sus juegos que permitan el juego cruzado. Si se alejan de su posición hegemónica que han mantenido y reforzado con las ventas de PlayStation 4, seguramente tengan que optar por el crossplay como una necesidad.
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