Recuerdo con gran cariño el día de 2009 en el que fui al cine con un amigo a ver Avatar. El último universo de ciencia-ficción creado por James Cameron me dejó totalmente embobado por su bellísimo apartado visual, y el hecho de que fuese la primera gran película en 3D me hizo esperar como loco una secuela que no llegó hasta el año pasado.
Habiendo disfrutado por fin de El Sentido del Agua hace unos meses (recompensando mis 13 años de paciencia), Ubisoft nos brindó la oportunidad de probar durante un par de horas Avatar: Frontiers of Pandora, su nuevo videojuego basado en esta popularísima IP. ¿Estará a la altura de las expectativas?, ¿Gustará a los fans?, ¿Podrá competir con los grandes juegos de 2023? Es la hora de contestar a todas estas preguntas.
Cuando vi el gameplay inicial de este título desarrollado por Massive Entertainment me dio la sensación de que podría convertirse en uno de los lanzamientos más interesantes de 2023. La perspectiva en primera persona, el gunplay y otros tantos elementos de la exploración me recordaron mucho a las cosas que me gustan de la saga Far Cry, por lo que supuse que Avatar: Frontiers of Pandora brindaría una experiencia de juego muy similar.
No obstante al coger el mando y jugar durante un par de horas llegué a la conclusión de que este título va más allá. No se trata de un "Far Cry con skin de Avatar", de hecho tiene bastante personalidad.
Lo primero que me llamó la atención fue la propia movilidad del personaje: hay un gran énfasis en el parkour "a lo Dying Light" que no esperaba para nada. Los Na'vi son seres que poseen características físicas superiores a las de los humanos, y los desarrolladores quisieron sacar partido de ello de forma ingeniosa. El juego te invita a correr, saltar y escalar para descubrir secretos y utilizar atajos a toda velocidad, y la vegetación juega un papel tan protagonista como curioso.
En las películas de Avatar la flora tiene una importancia incluso mayor que la fauna (lo cual no se ve todos los días), por lo que Massive decidió darle un rol clave que influyese tanto en la historia como en la jugabilidad. Los escenarios están repletos de plantas de toda clase, algunas de ellas proporcionan aumentos temporales de velocidad, otras se pueden usar de trampolín y otras permiten trepar a lugares elevados, lo cual hace que moverse por el mapa a pie no sea aburrido.
Luego hay una mecánica que permite escanear tanto animales como vegetación que me generó ciertas dudas por su utilidad a largo plazo. ¿Recoger información de cada planta aporta información útil o simplemente sirve para añadir más lore? Eso es algo que descubriremos tras el lanzamiento del juego.
Lo que más me gustó de Avatar: Frontiers of Pandora fue la forma en la que recrearon el planeta. Realmente sentí que estaba explorando el exótico mundo primigenio que veía desde la butaca del cine, y ese es todo un logro. Como cabría esperar de un juego de Ubisoft, el mundo abierto es gigantesco y los escenarios invitan a perderse para verlo todo (me pasó varias veces), pero lo más importante es que no se siente vacío. Siempre es un gusto recorrerlo a pie o volando a lomos de un Ikran.
Durante mi demo completé la misión en la que nuestro personaje consigue su propia montura alada, y dejadme que os diga que fue tan emocionante como cuando Sully obtenía la suya en el primer largometraje. Sobrevolar Pandora con esta criatura es algo que os encantará, ¡Estoy seguro de que apenas echaréis mano del Viaje Rápido!
Por supuesto no todo iba a ser explorar y disfrutar de las vistas. Avatar: Frontiers of Pandora es una aventura que tira mucho por la acción y las refriegas. En este apartado regresan las inevitables comparaciones con Far Cry, ya que los enfrentamientos que viví en la demo se basaban en asaltar bases enemigas para destruir objetivos.
Como era de esperar el jugador tiene la libertad de entrar a lo bestia y liarse a tiros o bien optar por el sigilo y la infiltración por caminos alternativos. En cualquier caso cuando toca apretar el gatillo vemos que el gunplay es lo suficientemente divertido como para ofrecer grandes momentos de tensión y derroche de adrenalina. Y ojo porque esto también se traslada al cielo, ya que cuando intentemos huir o sobrevolar bases con nuestro Ikran habrá que lidiar con helicópteros enemigos en épicos combates aéreos.
En este tipo de misiones también es importante hackear ciertos ordenadores y paneles de control mediante un minijuego con contrarreloj que, a pesar de parecer simplón, podría llegar a apretarnos las tuercas a medida que se incremente su dificultad.
De la historia principal no puedo decir mucho porque las dos horas que estuve inmerso en el mundo de Avatar: Frontiers of Pandora no me permitieron meterme de lleno en ella. Lo que sí os puedo comentar es que nuestro personaje es un Na'vi que, tras ser secuestrado y entrenado por la RDA, debe reconectar con sus raíces a la vez que interactúa con distintos clanes y protege Pandora de la amenaza de "la gente del cielo". Digamos que el juego invita a que forjemos nuestra propia aventura inmersiva original.
Y con respecto al apartado gráfico debo reconocer que Massive cumplió con lo que ya se intuía en los tráileres. El mundo abierto que han creado está lleno de vida y cuenta con una vegetación y una distancia de dibujado que quitan el hipo. Quizás no presenta un nivel de detalle excelso, pero su fantástica ambientación lo compensa. Además me gustaría destacar la BSO y la retroalimentación háptica del Dualsense, dos elementos muy cuidados que no hacen otra cosa que favorecer la inmersión del juegador.
Avatar: Frontiers of Pandora es una aventura de mundo abierto en primera persona que me ha sorprendido para bien. Siendo completamente sincero con vosotros, pensé que Ubisoft nos iba a ofrecer un Far Cry con skin de Avatar que buscaría aprovecharse de la increíble popularidad de la IP, pero me equivocaba.
Las dos horas que pasé saltando, explorando y combatiendo en Pandora se me pasaron volando y me dejaron un buen sabor de boca. Como una persona que disfrutó de las películas de James Cameron os puedo decir que este título no os defraudará, y de hecho apunta a convertirse en el último gran juego de 2023.
El 7 de diciembre saldremos de dudas cuando se lance para PC, PlayStation 5 y Xbox Series X|S.
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