Mionix, empresa afincada en Suecia, es una de las principales constructoras de productos gaming de gama alta para nuestros PCs. Aquí, en Areajugones, hemos podido probar algunos de sus periféricos más potentes; en concreto un pack conformado por lo mejor de lo mejor: el teclado Zibal 60, el ratón Naos 7000, el headset Nash 20 y la alfombrilla Alioth. Se trata de equipamiento de gama alta destinado a los jugones más exigentes y que demandan el mayor rendimiento posible. ¿Queréis saber qué nos han parecido estos periféricos? Acompañadnos en esta review para descubrirlo.
Comenzamos por uno de los productos más llamativos de Mionix, como es su imponente teclado Zibal 60 que llega a España, como no podía ser de otra manera, con la distribución de teclas (layout) propia del castellano. Como ya podéis apreciar en las especificaciones e imágenes, se trata de un teclado mecánico con una estética bastante minimalista que se aleja de los teclados gaming a los que estamos acostumbrados hoy en día para apostar por algo más retro. Este aspecto es probablemente el más subjetivo, pero personalmente, la forma cuadrada, el color negro sobrio y el hecho de no incluir más de lo necesario a nivel estético, me gusta bastante, combinando a la perfección con casi cualquier cosa que tengamos en nuestro escritorio.
A esta sobriedad aporta su granito de arena también la iluminación de fondo, que, al contrario de en la mayoría de teclados actuales, no está para llamar la atención o lucirse, sino para ayudar al tecleo. Las teclas se iluminan con una intensidad que, a pesar de tener tres niveles regulables, es bastante moderada incluso cuando la ponemos al máximo; pero que hace destacar bastante bien las teclas al ser de un color verde lima que resalta sobre el negro del teclado.
Dejando de lado la estética minimalista, entramos de lleno al grueso de este teclado de Mionix, del cual destaca, a primera vista, la estructura de plástico sobre la que se monta. Se trata de un plástico resistente y de calidad que, combinado con el elevado peso del teclado (alrededor del kilo y medio) aporta una sensación de robustez que se agradece y mucho a la hora de teclear. En cuanto a los switches, el Zibal 60 de Mionix incorpora Cherry MX Black, unos mecanismos clásicos que ofrecen una durabilidad estupenda y una dureza bastante alta. Es una decisión muy acertada la inclusión de este tipo de switches en un teclado destinado al gaming como es el que tenemos entre manos ya que, la dureza del mecanismo (unos 60 gramos) evitará pulsaciones indeseadas. No recomendamos en absoluto este teclado si lo que se busca es escribir, ya que la dureza de los switches podrá acabar provocando un agotamiento en los dedos; pero para el gaming es una elección magistral.
Como detalles adicionales, el Zibal 60 nos incluye las clásicas patillas traseras para levantar el teclado, un reposamuñecas que se antoja indispensable debido al perfil tan alto que tiene, varias teclas con funcionalidades multimedia y un cable trenzado de un grosor muy considerable. Al final del cable, entendemos el grosor cuando vemos que se incluyen dos conexiones USB y dos jack (una de entrada y otra de salida para el audio); y es que el propio teclado nos incluye los puertos necesarios para conectar a él y no a la torre nuestro headset, además de dos puertos USB 2.0. Este detalle se agradece mucho, sobre todo si sois de los que tenéis la torre fuera del escritorio.
Pasamos ahora a otra de las piezas clave de este pack, el ratón Naos 7000 que, de nuevo es de una gama alta a pesar de ser visualmente, como ya ocurre con el teclado, bastante minimalista. Sí es cierto que en este producto las líneas rectas y bordes afilados del teclado dejan paso a un diseño un poco más moderno. Estas líneas más agresivas, sin embargo, no responden para nada a una función estética aunque así lo pudiera parecer a primera vista, sino que se trata completamente de ergonomía, algo de lo que nos damos cuenta nada más hacemos reposar nuestra mano sobre este ratón. El Naos 7000 se adapta como un guante a nuestra mano, teniendo un espacio determinado para cada uno de los dedos de la mano y aprovechándose de un perfil medio para que podamos jugar durante horas sin notar fatiga o dolor alguno en nuestra mano o muñeca. Por otro lado, este ratón de color negro liso incorpora algo de iluminación en la rueda y en el lomo, marcando la forma del logo de Mionix. Estas luces, de nuevo, no son demasiado intensas, pero pueden cambiarse de color a placer desde el software del dispositivo.
A la hora de usarlo, como ya contábamos, se siente realmente cómodo gracias a su ergonomía. El peso que tiene, que no es demasiado alto ni bajo, hace que vengamos del dispositivo que vengamos no se nos haga nada difícil acostumbrarnos (personalmente vengo de uno muy pesado y me he adaptado bastante rápido). Además, las patas de teflón permiten que se deslice sin ninguna dificultad sobre casi cualquier superficie, haciendo del Naos 7000 un ratón realmente versátil.
Por otro lado, como se aprecia en las especificaciones, el Naos 7000 incorpora 7 botones programables a nuestro gusto: tenemos, además de los clásicos click derecho, izquierdo y central con la rueda, dos pares de botones; los primeros de ellos se encuentran situados en la parte superior, justo detrás de la rueda, mientras que los otros dos están ubicados en la parte izquierda, encima del hueco para nuestro pulgar. Todos estos botones son de un acceso bastante sencillo y, gracias a unas curvas características, se diferencian fácil y rápidamente, evitando clicks erróneos. Además, funcionan a la perfección, sin trabarse ni dar problema alguno a lo largo de nuestras sesiones. Por último, la rueda del ratón tiene un recubrimiento de goma con estrías que favorece el agarre y hace una maravilla usarla, a pesar de que no tiene mucho recorrido con el dedo. Sin embargo, hay un punto en contra y es que el ratón se encuentra recubierto por completo por una superficie gomosa que, aunque es agradable al tacto, no termina de convencer ya que este tipo de recubrimientos suelen estropearse con facilidad, quedándose las marcas de nuestro uso con relativa rapidez.
Este ratón es plug & play, es decir, no necesitaremos drivers o software adicional para usarlo; sin embargo, sí necesitaremos un programa descargable desde la web de Mionix para exprimirlo y personalizarlo a nuestro gusto. En primer lugar, cabe destacar que el programa funciona a la perfección, teniendo muy poco impacto en nuestro equipo, siendo rápido y simple, pero ofreciendo unas cuantas opciones para nuestro Naos 7000. Por un lado, podremos guardar hasta 5 perfiles distintos de personalización total. Destaca el hecho de que podamos darle la utilidad que deseemos de forma individual a cada uno de los botones de nuestro ratón. Por otro lado, también podemos alternar la frecuencia de transmisión y definir la resolución de los 3 niveles a los que tenemos acceso hasta un máximo de 7000 DPI (menor que en otros ratones pero más que suficiente para casi cualquier usuario; nosotros hemos rondado las 2000 para jugar). A través del software podemos modificar también la iluminación, variando su color, intensidad y modo, eligiendo entre sólido, parpadeo, pulso o respiración. Destaca, de este programa, la herramienta de análisis de superficies, exclusiva de la marca Mionix y que nos permite analizar la superficie sobre la que estamos usando nuestro ratón para ofrecernos los ajustes idóneos para nuestro ratón.
Además de esto, el Naos 7000 viene con un cable trenzado de unos 2 metros de longitud con una conexión USB que, si bien es cierto que es bastante más fino que el del teclado, no parece que vaya a dar problema alguno o reducir la vida del ratón, que apunta bastante alto.
Como mejor compañera de nuestro ratón Naos 7000 hemos podido tener la alfombrilla Alioth, la cual está disponible en varios tamaños, aunque en nuestro caso hemos podido disfrutar de su versión XXL. Este modelo tiene un tamaño de 120 cm de largo por 50 cm de alto, ofreciendo una superficie para ocupar prácticamente todo nuestro escritorio y sobre la que situar tanto el ratón como el teclado.
La alfombrilla Alioth es probablemente una de las más minimalistas que hemos visto en mucho tiempo y se aleja de los clásicos tonos gamer con colores chillones y dibujos espectaculares para apostar por un diseño sobrio y elegante. Llega con un color negro liso a juego con todo el pack, acompañado tan solo por las letras características de Mionix situadas en un extremo con un tono gris oscuro que las hace casi imperceptibles.
Pero, a pesar de esta sencillez visual, la alfombrilla Alioth es una de las mejores elecciones que podemos tomar a la hora de situar nuestros ratones gracias a contar con una superficie de microfibra que ayuda al sensor óptico a detectar a la perfección hasta el mínimo movimiento, previniendo la pérdida de datos de esta forma. La baja fricción que ofrece a las patas de teflón del Naos 7000, combinado con su escaso grososr y su suavidad, la hacen la compañera perfecta, no solo del ratón del que os hablábamos antes, sino de cualquiera.
Por último, en esta alfombrilla cabe destacar que la superficie superior viene con un recubrimiento hidrofóbico; es decir, que no tendremos que preocuparnos si derramamos algún líquido ya que no absorbe el agua. La superficie inferior, por su parte, viene con un recubrimiento de caucho estriado que evita hasta el más mínimo desplazamiento, fijándola perfectamente a nuestra mesa. Ambas superficies, tanto la superior de microfibra como la inferior de caucho, vienen unidas por un remate de costura que evita que se deshilache lo más mínimo, consolidando a esta alfombrilla como una de las mejores que hemos tenido entre manos.
Como último producto de este pack hemos podido disfrutar de los Nash 20, el headset de Mionix que, al igual que el resto de periféricos, apunta muy alto, pero siempre con una estética minimalista dominada por el color negro. En este caso, la forma de los auriculares es entre cuadrado y de diamante, con un tamaño bastante grande y llegando rematados con el logo de la marca "tallado" en ellos. El único punto de color lo ponen las letras de la diadema que, en blanco y verde, nos indican tanto la marca como el modelo del headset que estamos utilizando.
Siguiendo con la forma, tenemos unos auriculares que se adaptan perfectamente a la forma de nuestras orejas, por grandes que estas sean, así como una diadema que incluye una almohadilla bastante gorda para que sintamos la menor fuerza posible. Por desgracia, el tamaño de los Nash 20 los hace relativamente pesados y, aunque es cierto que en sesiones largas no resultan incómodos ni llegan a hacer daño, los notaremos en todo momento. No molestan, pero sabes que están ahí y es difícil olvidarse ya que tienen un tamaño y peso considerables.
Pero como consecuencia de esto, nos encontramos con una calidad que deslumbra. Lo primero en lo que nos fijaremos cuando nos los pongamos por primera vez es en la capacidad de aislar el ruido que tienen y que hace prácticamente imposible enterarnos de lo que ocurre en el exterior. Además, la calidad del sonido es estupenda, tanto para jugar a videojuegos como para ver películas o escuchar música. Es impresionante el sonido estéreo y la calidad de, sobre todo, los graves, cosa que hará que disfrutemos de la música como nunca. Por otro lado, para regular el volumen del sonido, podemos hacerlo desde los propios cascos y es que incluyen la típica rueda para modificar el volumen; pero no en un punto del cable, sino en la orejera izquierda por la parte trasera, haciendo así que sea rápido y sencillo localizarla.
Por su parte, los Nash 20 incluyen un micrófono de calidad en el extremo de una pequeña barra de unos 12 centímetros de longitud que sale de la orejera izquierda del headset. Está claro que no es un micrófono de pie, pero para su reducido tamaño, rinde realmente bien, aislando parte del ruido ambiental y ofreciendo una calidad de voz con bastante fidelidad. Este micrófono cuenta con un diseño realmente bueno que nos permite colocarlo en posición vertical cuando no lo estamos usando, evitando así molestias; además, cuando la posición está por encima de cierto punto, el micrófono se apaga automáticamente, evitando que nos preocupemos por mutearlo desde el PC.
En definitiva, el pack que hemos podido probar de Mionix está claramente enfocado a un público muy concreto. Se trata de productos de alta gama con un rendimiento sobresaliente todos ellos y a los que no es fácil buscarle pegas, pues están claramente enfocados al gaming, el apartado en el que más los hemos probado. El diseño de todos ellos es genial y, aunque es un apartado realmente subjetivo, se agradece que haya marcas que se desvíen de la clásica estética gamer cargada de luces de colores y curvas aerodinámicas para crear este pack de periféricos minimalista a la par que elegante.
¿Son productos caros? Pues lo cierto es que sí, todos y cada uno de ellos se encuentran en un rango de precios elevado dentro de su clase. Pero es igualmente cierto que valen lo que cuestan ya que ofrecen un rendimiento propio de la gama alta que Mionix ofrece. Si lo que buscáis es el máximo rendimiento, sin preocuparos demasiado por lo que vuestra cartera pueda sufrir, estad seguros de que no os arrepentiréis de comprar estos productos de la marca sueca, en los que encontraréis una buena estética, durabilidad, precisión y comodidad. Poco más podemos pedir a un conjunto de artículos realmente bueno.
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