Los datos que hoy ha publicado la Asociación Española de Videojuegos son llamativos por varios motivos. Uno de ellos, es la relevancia que va adquiriendo la industria en un país como el nuestro, en el que todavía no hay una red empresarial a grandes niveles como ocurre en otros estados: Francia, Reino Unido, China, Japón o Estados Unidos. Aún así, la industria de los videojuegos ya equivale en nuestro país al 0,11% del PIB según la AEVI, una cifra que evidencia la creciente importancia que está adquiriendo y es un toque a los poderes políticos para generar ayudas (recordamos que se ha perdido una partida por el camino).
Según este informe, la industria de los videojuegos emplea a 8.790 personas en diferentes profesiones y cargos. Además, por cada euro que se invierte en este ámbito se obtiene un impacto de tres euros en el conjunto de la economía general del país; y por cada trabajo generado en el sector de los videojuegos, se crean 2,6 en otros ámbitos. Son cifras muy positivas que se suman a una cifra de 3.577 millones de euros que conforma el impacto total en la producción (suma de los efectos directo, indirecto e inducido).
Se revela también que el 14,3% del sector de edición está relacionado con videojuegos, el 9,6% de la producción audiovisual (cine, televisión, vídeo...), el 3,8% de la programación y análisis de datos y el 3,2% de las telecomunicaciones. Es decir, la importancia de la industria de los videojuegos va más allá de su propio tejido.
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