En una galaxia muy, muy, lejana, hay quien dice que los juegos de Star Wars pasaron a mejor vida. Que ya no había esperanza. Que la licencia estaba siendo torturada. Pero un día, Respawn Entertainment y EA, llegaron a un acuerdo que marcaría esta leyenda para siempre. Y es que tras el anuncio de Star Wars Jedi: Fallen Order, la esperanza entre los jugadores resurgió como la llama. Por fin una aventura centrada en un solo jugador. Nosotros hemos tenido la oportunidad de jugarlo. Acompañadnos en este trayecto si queréis saber de nuestra experiencia con Star Wars Jedi: Fallen Order.
El destino de Cal
Este juego irradia simpleza allá por donde lo mires. La experiencia es directa para con el jugador. Quiere que disfrutemos de una historia sin más, sin ningún tipo de florituras. Esto ya se puede sentir al iniciar el juego por primera vez a través de su menú principal. Y es que en Star Wars Jedi: Fallen Order comenzaremos a jugar casi al instante. No hay créditos de por medio, no se tratará de una introducción en la que veremos el título del juego en pantalla. Es la propia ambientación la que habla, marcando el ritmo de su comienzo y dándonos información sobre el presente de nuestro protagonista: Cal Kestis.
Fallen Order refleja su espectacular ambientación en su introducción
Star Wars Jedi: Fallen Order es una historia que se sitúa 5 años después del levantamiento del Imperio, tras la masacre jedi que pudimos ver en Star Wars Episodio III: La Venganza de los Sith. Y es que nuestro protagonista, fue una víctima directa de este terrorífico evento, trabajando ahora como chatarrero en el planeta Bracca. No obstante, todos sabemos que su historia no parará ahí, ya que a Cal se le abrirá todo un mundo en el que deberemos de explorar junto a él y descubrir los misterios que atesoran éstos. Y es que si Star Wars Jedi: Fallen Order se trata de un título de acción, también tiene elementos de exploración que enriquecerán nuestra experiencia con el juego.
Moviéndonos por este rincón de la galaxia
Durante el trascurso del juego, tendremos la posibilidad de viajar a un buen puñado de planetas, pudiendo explorarlos a nuestro antojo mientras avanzamos en nuestra aventura. Para ello disponemos de la ayuda del pequeñín BD-1, un droide que nos acompañará durante toda esta historia y que será vital para avanzar, pues irá adquiriendo habilidades que nos ayudarán a lo largo de nuestro camino. El movimiento por el mapa junto a este pequeñín, además de sus mecánicas de combate, son dos de los puntos más destacados de este juego.
Todo jedi debe desplazarse como el viento. El parkour es muy importante en un videojuego de tales características, sobre todo si nuestro protagonista empuña una espada láser y tiene todo un mundo por explorar. Aquí es donde vislumbraremos las mecánicas propias de un metroidvania, obteniendo multitud de experiencias de plataformeo y el hecho de poder recorrer el mapa a nuestra bola, accediendo a un gran número de atajos que nos salvarán la vida en buena medida. Y es que si tenemos que mencionar un título del que bebe directamente este juego, es sin duda la saga Souls. Su sistema de puntos de guardado (meditación), combate, los atajos en el mapa, el hecho de perderlo todo al morir… Son bastantes los elementos en los que nos ha recordado a la franquicia creada por Hidetaka Miyazaki. Y es que desde Respawn no han tenido temor en querer exponer a través de este juego, su inspiración y admiración en sagas como la mencionada antes, o incluso a Uncharted o Tomb Raider, ambos ligados a su espectacularidad, plataformas y resolución de puzles.
Recorrer el mapa es uno de los mayores gozos visuales
En Star Wars Jedi: Fallen Order, Cal tendrá numerosos puntos de meditación. Estas zonas funcionan a modo de punto de control, así como para restaurar nuestra salud y mejorar las habilidades de nuestro protagonista mediante la adquisición de puntos. Éstos nos los irán dando a medida que cumplamos misiones, acabemos con enemigos o descubramos elementos por todo el mapa. Y es que Cal tiene el don de la psicometría, una habilidad poco común en los jedi. Nuestro personaje siente el pasado tras utilizar la fuerza en ciertos objetos. Lo cierto es que se trata de una buena forma de documentarnos acerca del pasado de este universo, dejando atrás el típico cacharro de audio que nos encontramos en infinidad de títulos.
Meditar es esencial. Es el equivalente a las hogueras de Dark Souls. Si morimos, reaparecemos en el último punto de meditación, con toda la experiencia perdida tras el último punto de habilidad conseguido. Para volver a recuperarla, basta con dañar al enemigo que nos eliminó.
Prepara tu espada láser
Combatir en Star Wars Jedi: Fallen Order es uno de los mayores gozos de este juego. Blandir una espada láser nunca tuvo tanta espectacularidad como en este título. Se nota que desde Respawn han puesto mucho mimo en ello, ya que es uno de los puntos fuertes del imperio levantado por Lucas. Su sistema de combate se basa en la guardia y vitalidad. Deberemos romper la guardia de nuestro enemigo (sobre todo los más fuertes), para restarle salud y acabar con ellos. Además, mezclar los poderes de la fuerza con el sable láser, nos dará cierto grado de creatividad a la hora de aniquilar soldados imperiales y criaturas. Hay habilidades que conseguiremos según avanzamos en la historia, y hay otras que deberemos de desbloquear en el árbol de habilidades de los diversos puntos de meditación. Además, no solo encontraremos este tipo de puntos, sino también mesas de mejora para nuestro sable láser y para adquirir habilidades para BD-1. Y es que si hay algo que a los fans de Star Wars nos gusta más que dar espadazos por ahí, es personalizar nuestro sable láser.
Blandir una espada láser nunca tuvo tanta espectacularidad como en este título.
Star Wars Jedi: Fallen Order
Durante el trascurso de esta aventura, tendremos múltiples opciones de personalización. Por un lado, podremos modificar el aspecto de nuestra espada láser, como ya hemos mencionado. En este punto podemos retocar empuñadura, emisor, color, interruptor, e incluso el material del que está hecha. Dichas modificaciones las encontraremos por todo el mapa, por medio de cajas normales u otras a las que BD-1 pueda piratear. Esta habilidad, como todas ellas, las adquirirá BD-1 durante el progreso de la historia en las mismas mesas donde personalizamos nuestro sable láser.
Una completa personalización en la espada láser
Dejando a un lado la espada, en Fallen Order también podemos personalizar nuestro aspecto y el de BD-1, así como el de la nave (¿He mencionado que tenemos una nave?). Aquí no disponemos de ningún tipo de armadura, siendo la apariencia lo único que podremos modificar.
Las virtudes de BD-1
Como ya hemos mencionado antes, BD-1 es un amiguito crucial en nuestra historia. Nos permitirá progresar en el mapa gracias a sus mejoras, y nos curará gracias a estimulantes, los cuales se recargarán en los puntos de meditación y que también podremos mejorar su potencia (¿Os suena?). Además, este pequeñajo nos ayudará en los distintos puzles que nos encontremos por el juego, dándonos pistas por si nos quedamos atascados. No os vamos a engañar, en alguno hemos necesitado de su ayuda, ya que no son tan simples como los de la saga Uncharted, por poner un ejemplo. Además, BD-1 dispone de un holomapa donde veremos en un azulado 3D, dónde nos encontramos y por qué camino deberemos de continuar. Una de las grandes inclusiones a nuestro parecer en este juego, es el de elevar hasta el máximo su componente metroidvania, diciéndonos hacia dónde ir, pero no cómo. De esta forma, deberemos de explorar por el mapa y estar atentos al holomapa para no perdernos. Además, habrá zonas en las que tendremos que volver, ya que adquiriremos habilidades que antes no podíamos usar.
BD-1 se trata de un compañero fundamental en nuestra aventura
Una nave que se nos queda pequeña
La nave es un espacio en miniatura que nos servirá de hub. Aquí podremos descansar, viajar (obviamente), gastar nuestros puntos de habilidad, y visualizar uno de los elementos coleccionables del juego: las semillas. BD-1 analizará todo nuestro entorno, desde enemigos, hasta criaturas y objetos por todo el mapa. Además, también lo hará con las semillas, las cuales son coleccionables que podremos ver dentro de la nave. Lo cierto es que esperábamos algo más de la nave, como alguna misión secundaria, más pasillos, o incluso algo más de modificación que únicamente su color. Y hablando de cosas que esperábamos, los personajes que la incluyen, los cuales nos acompañarán durante toda nuestra aventura, carecen de complejidad, al igual que su historia. Y es que si bien comentábamos al principio de este análisis que este título irradia simpleza, también lo hace en el sentido contrario de la balanza. Quitando la espectacularidad de sus escenas y elementos cinematográficos, su argumento no sorprende en ninguno de sus aspectos. No obstante, a los fans de Star Wars les alegrará saber que encontraremos multitud de referencias a la franquicia, así como a sus películas.
El espacio en la nave es reducido, pero cumple con sus funciones básicas
Fallen Order en su apartado técnico y artístico
Su apartado técnico tampoco es algo que destaque en exceso. Recordamos que este juego utiliza el motor gráfico Unreal Engine 4. Y si bien luce unos escenarios impresionantes, la magia se pierde un poco al ver la calidad gráfica de sus personajes. Con esto no queremos exponer que no sea adecuada, pero quizás se queda por debajo de lo esperado. Normalmente esto no sería un punto negativo, pero contando con que una de las intenciones con este juego era sorprendernos en este aspecto, no lo ha logrado. Además, en lo que respecta a la versión de PlayStation 4 que hemos analizado, hemos encontrado una gran cantidad de bajadas en el framerate, sobre todo en zonas amplias y aquellas cargadas de enemigos. Se nota que a las consolas de actual generación se les hace cuesta arriba los últimos AAA. No obstante, no podemos decir lo mismo de su rendimiento en PC, PlayStation 4 Pro o Xbox One X, luego dicho punto negativo afectaría exclusivamente al juego ejecutado en las versiones estándar de consola.
Su majestuoso apartado artístico eclipsa la mediocridad de su apartado gráfico
No obstante, muchas veces el rendimiento se ve eclipsado por su majestuosidad artística. Y es que durante esta aventura, tendremos el placer de descubrir increíbles mundos, disfrutando de una ambientación muy variada que mezcla el poderío tecnológico del imperio con impresionantes parajes naturales en sus distintos planetas. Y todo ello acompañado de una banda sonora a la altura de lo que se espera en un producto Star Wars.
Conclusión
Star Wars Jedi: Fallen Order es el título que todo fan de la franquicia lleva esperando desde quizá más de una década. Su sistema de combate, movimiento y mecánicas metroidvania, así como la simpleza en la que ejecuta cada uno de sus puntos, convierten a este título, uno muy disfrutable por el gran público. Quizás su corta historia y argumento sin complejidad ponga en duda a algunos de vosotros, no obstante, con tan solo su componente de exploración e increíble apartado artístico, ya merece la pena.
Respawn Entertainment consigue con Fallen Order una experiencia para un jugador completa en todos sus aspectos. Elementos como su sistema de combate, componente de exploración y majestuosidad en su apartado artístico, eclipsan en cierta medida su argumento sin complejidad, mediocridad gráfica o corta duración. Un título muy disfrutable para la gran mayoría de jugadores y que merece la pena tener en nuestra colección.
Historia
Jugabilidad
Apartado artístico
Calidad gráfica
Experiencia completa para un jugador
Apartado artístico majestuoso
Un sorprendente componente de exploración
La posibilidad de personalizar tu sable láser
Sistema de combate genialmente implementado
Recorrer el mapa es todo un gozo
La incorporación de BD-1
Un argumento sin complejidad
Calidad gráfica por debajo de lo esperado
Duración corta
Algunas caídas de framerate en zonas amplias y cargadas de enemigos
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