Cuando me llegó la oportunidad de ver antes de su estreno Outer Range, tuve que buscar en redes sociales y blogs de qué narices iba esta serie de Amazon Prime Video que llegaba sin hacer ruido. Leí algo sobre un 'western' y me dio pereza, pero pronto descubrí que tendría tintes sobrenaturales, así que no esperé más y me puse con ella.
Ahora que he visto los primeros episodios de Outer Range, puedo resumir mi crítica en: ¿qué narices es esto? Y en muchas ocasiones, es posible que esta reacción sea más positiva que negativa, porque implica que ha generado un impacto en nosotros que no hubiéramos imaginado en un primer momento.
Hay una corriente seriéfila que adora los dramas intensos con tintes sobrenaturales, y mis dos exponentes serían The Leftovers y Estación Once. Pues bien, ahora he de sumar Outer Range porque creo que esta serie bebe mucho de ese estilo existencial que tanto nos vuela la cabeza.
¿Y cómo lo logra? Con una premisa que parece sacada de cualquier 'western' tradicional. El protagonista es Royal Abbott, un ranchero que quiere conseguir lo mejor para su familia y por ello lucha por mantener su tierra. Pero de repente, un misterio llega a la zona. ¿Cómo acabará afectando tanto a él como a los suyos?
Si has leído hasta aquí, creerás que vas a ver un drama del Viejo Oeste, pero lo cierto es que esta saga familiar tiene tintes de humor negro y thriller sobrenatural que a mí me han sorprendido mucho. Claro, hay disputas por tierras, como no puede ser de otra forma ('antes, to' esto era campo'), pero creo que lo que mejor acaba funcionando es la parte del misterio.
Aunque Royal Abbott sea el protagonista (interpretado de forma magistral por Josh Brolin), en Outer Range también hay hueco para la comunidad como lo había en The Leftovers y Estación Once. Imagina que estás tan tranquilo en tu pueblo y aparece un enorme agujero que provoca situaciones sobrenaturales. ¿Y si se distorsiona el espacio y el tiempo? ¿Y si unos pocos pueden ver el futuro?
Este suceso acaba afectando a todos los habitantes de la región por igual, y por ello sus historias también te van a acabar interesando. Ahora bien, lejos de contarlo con elevado dramatismo, el creador (Brian Watkins) se aleja del tono solemne de Yellowstone (el otro proyecto 'western' que arrasa en TV desde hace algunos años) y se acerca a la ironía y al humor negro con un guión ácido y mordaz.
Esto no le impide reposar en otros momentos y dejarnos planos y secuencias para el deleite visual, sin más importancia narrativa que emocionarnos ante lo que estamos viendo en pantalla. No es extraño tampoco estar frente a largos silencios en los que todos los protagonistas acaban callando y dicen más por sus miradas y gestos que por sus palabras. Porque al fin y al cabo, Outer Range tiene también mucho de existencialismo aunque lo esconda en una fina capa de comedia.
En definitiva, Outer Range es una serie de Amazon Prime Video que se ha convertido en una de mis favoritas de los últimos meses. Su trama acaba enganchándote capítulo tras capítulo, y esa mezcla perfecta de thriller sobrenatural, drama existencialista y comedia de humor negro es lo que quería ver desde hace mucho tiempo y no era consciente de ello. Y si, Outer Range es extraña.
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