En el año 2017 salió a la venta Nintendo Switch. Sí, se ha convertido en la generación más larga de la historia de Nintendo, pues siete años después, en pleno 2024, todavía no se sabía nada acerca de su consola sucesora. Pero tampoco es algo que le haya pesado a mucha gente, pues la máquina ha seguido recibiendo grandes juegazos que le han permitido terminar siendo una de las consolas más vendidas de toda la historia de esta industria.
Y ya desde el año 2017 se descubrieron un montón de detalles acerca de Nintendo Switch. Detalles que van desde los menús, los sonidos, cosas de la arquitectura de la consola hasta, cómo no, los propios cartuchos donde están almacenados los juegos. Y es que, efectivamente, seguro que muchos sabéis que los cartuchos están asquerosos. No hace falta chuparlos directamente para darse cuenta; con simplemente llevarse los dedos con los que has tocado el cartucho a la boca se te quedará un sabor muy amargo. Pero... ¿a qué se debe esto?
Los cartuchos de Nintendo Switch están asquerosos no por algún tipo de plástico que tengan que sepa mal, ni tampoco es por accidente. Y es que Nintendo a la hora de fabricarlos les aplica una capa de un químico llamado benzoato de denatonio. Se caracteriza por tener un sabor extremadamente amargo que le causa rechazo a cualquier persona. Aunque se trate de un químico, no es algo tóxico y no pasa nada si alguien lo chupa, más allá del asco que le pueda dar al comprobar a qué sabe.
El benzoato de denatonio es un químico bastante común en productos como envenenamientos domésticos, productos de limpieza o en los disuasores para las personajes que quieren evitar comerse las uñas. De hecho, al saber esto quizá ya te hagas una idea de para qué le aplican esta capa de benzoato de denatonio a los cartuchos, ¿verdad?
Pues como muchos habréis adivinado, es para evitar que los niños o las mascotas se las traguen. Al ser objetos pequeños y la consola es un dispositivo que puede ser usado por todos los públicos, incluidos niños pequeños, no sería raro ver que los más pequeños se llevan estos cartuchos a la boca, lo que puede provocar que se lo traguen por accidente y haya consecuencias fatales.
Pero al aplicarle esta capa de benzoato de denatonio a los cartuchos, tendrán un sabor muy malo y en el momento en el que entren en contacto con la boca del niño o de una mascota, les causará un gran rechazo de inmediato y lo soltarán. Así evitarán que puedan llegar a tragárselos. Como podéis ver, una decisión bastante ingeniosa, a la altura de lo que Nintendo suele hacer. Eso sí, recuerdo que este químico no es tóxico, por lo que no hay peligro si el poseedor de una Nintendo Switch tiene hijos pequeños que puedan llevarse a la boca sus juegos.
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