A menudo, los actores y actrices deben someterse a importantes entrenamientos y pesadas dietas para perder o ganar el peso necesario para dar vida a su próximo papel, pero lo cierto es que en ocasiones, este cambio de hábitos puede provocar que tu salud se vea afectada, algo que ya ha podido comprobar en sus carnes el célebre George Clooney, cuyo cambio físico no le sentó nada bien.
Y es que el actor ya preocupaba en las últimas fotografías captadas de él: con una barba un tanto desaliñada, marcadas ojeras y un rostro más delgado, estaba claro que el intérprete estaba preparándose para un papel diferente. En concreto, hablamos de algo que sucedió hace ya meses mientras rodaba The Midnigth Sky, película que se estrenará el próximo 23 de diciembre y en la que veremos a un George Clooney irreconocible: pasó de 80 kilos a 50 en menos de cuatro meses.
Fue entonces cuando fue ingresado en el hospital por una pancreatitis derivada de una dieta muy estricta. Estuvo varios días encamado con intensos dolores abdominales, y volvió a perder 11 kilos en allí hasta que se recuperó. El propio actor reveló después que otro de los sacrificios a los que se sometió para este rol fue dejarse crecer la barba, algo que no le gustaba. Pero a sus hijos mellizos de 3 años les divertía: "escondían cosas en ella de las que yo no me daba cuenta hasta que llegaba al trabajo y decía: 'vaya, hay un palito de helado atascado en mi barba'".
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