*Actualización*: Boing no emitió la pasada noche el episodio 64 de "Dragon Ball Super" por un error en la programación. Hoy día 26 se pasara el episodio correspondiente a ayer, y mañana se continuará con el 66. Es decir, el orden es el siguiente: 65, 64, 66.
No es la primera vez que hablamos en este medio de censura ni será la última. Desde que "Dragon Ball Super" aterrizó en España el pasado febrero, los fans del anime han tenido que aguantar en repetidas ocasiones la fuerte censura que ha implantado Boing y que ha lastrado en gran medida la calidad general de los episodios. Escenas eliminadas, diálogos reducidos, y un claro afán de sobreprotección sobre los menores han sido los principales elementos que han rodeado a la franja horaria de programación de la serie. No obstante la pasada noche de Navidad la situación llegó a un punto álgido con un suceso que pocas veces se ha visto en televisión y que difícilmente podrá ser maquillado.
Tras un breve descanso, "Dragon Ball Super" iniciaba el arco de Goku Black con muchas esperanzas. Los comienzos de la serie no fueron muy bien recibidos, pero a partir de la llegada de Zamasu y el gemelo malvado del protagonista, la calidad general mejoró mucho, y esa tendencia se ha mantenido al alza hasta llegar al gran estándar que está presentando el Torneo de Poder. Lo que no esperaba nadie es que Boing decidiera pasar a un nuevo nivel de censura eliminando por completo uno de los mejores episodios de todo este arco.
La noche del 25 de diciembre estaba previsto que a las 22:55 horas de la noche (programación que se ha ido retrasando con el paso del tiempo) se emitiera el episodio numero 64 llamado "¡Alabadme y Adoradme! ¡El nacimiento de la fusión de Zamas!", momento en el que tras varios combates Zamas y Black Goku deciden unirse en un solo guerrero gracias a los pendientes Pothala. Sin embargo los fans que esperaban ver esto se encontraron con que Boing había eliminado dicho capítulo para pasar directamente al 65, censurando así los más de 20 minutos que dura el episodio.
La comunidad de fans en España llevan meses protestando por el maltrato de la cadena de Mediaset hacia la serie sin ningún éxito. Usuarios como Mr. Kaytos, que representan la voz de seguidores en nuestro país, se han encontrado una y otra vez con una pared que parece imposible de escalar. Y es que la responsabilidad de la fuerte censura recae plenamente del lado de Boing, que temerosa por impactar a su audiencia infantil, solicita una y otra vez modificaciones en los episodios a Toei Animation. Ni Francia ni Alemania ni ningún otro país donde se emite está sufriendo un atropello como el que aguantan los fans de nuestro país, y a juzgar por la poca comunicación de la cadena, nada parece que vaya a cambiar a corto plazo.
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