Si la huelga de guionistas de Hollywood terminó con un final feliz, la huelga de actores no lo tendrá tan fácil según ha confirmado el sindicato mayoritario, la SAG-AFTRA, a través de un comunicado. Tras semanas de silencio, se adelantó que estudios e intérpretes se encontraban negociando una salida rápida de este paro total que ha afectado a muchas producciones en rodaje o a punto de ser grabadas, pero horas más tarde se confirma que las negociaciones se han vuelto a suspender, en parte, por culpa de unas 'tácticas de intimidación' que no han convencido a los representantes del sector.
Antes de profundizar en lo que ha ocurrido, debes saber que los actores y los estudios no hablan en persona en una negociación tan importante como esta. Para ello, los intérpretes tienen a la SAG-AFTRA (Sindicato de Actores de Cine-Federación Estadounidense de Artistas de Radio y Televisión) y los grandes estudios a la AMPTP (Alianza de Productores de Cine y Televisión). Digamos que estas dos 'entidades' son las responsables de negociar los intereses de sus representados (actores y estudios respectivamente).
El miércoles pasado, la AMPTP explicó que el espacio entre las posturas de ambos bandos de esta huelga es "demasiado grande", mientras que la SAG-AFTRA mostró su profunda decepción por el trato recibido por parte de los estudios: "tácticas de intimidación" e instigación a sus miembros a presentarse en los piquetes organizados.
En cuanto a los obstáculos existentes entre ambas posturas, el principal es la propuesta de compartir los ingresos del streaming, algo que costaría 800 millones de dólares al año según la AMPTP. En cambio, la SAG-AFTRA asegura que los estudios mienten y la cifra es un 60% inferior (en torno a 320 millones de dólares). El sindicato de actores asegura que su proposición costaría únicamente 0,57 dólares por suscriptor cada año.
La SAG-AFTRA ha explicado en un comunicado la situación actual de las negociaciones: "a pesar de que hace una semana nos ofrecieran, sorprendentemente, una oferta peor que la que ofrecieron al principio de la huelga, hemos negociado de buena fe con ellos (...). Estas compañías se niegan a proteger a sus trabajadores de la IA, se niegan a subir sus sueldos para protegerlos de la inflación y se niegan a compartir una pequeña porción de la inmensa ganancia que vuestro trabajo les genera".
Los estudios también han hablado; consideran que sería insostenible pagar 800 millones de dólares al año a los actores de sus series y películas únicamente por mantener en el catálogo sus proyectos. Además, denuncian que "la SAG-AFTRA presentó pocos movimientos, si es que hubo alguno, sobre el resto de temas". Palabras que han puesto en alerta a la SAG-AFTRA, porque podrían confundir a los miembros del sindicato e instarle a abandonar las filas: "publicar información falsa intentando engañar a nuestros miembros para que abandonen nuestra solidaridad y apliquen presión en las negociaciones. Pero al igual que los guionistas, nuestros miembros son mucho más inteligentes que todo esto y no serán timados", denuncia la SAG-AFTRA.
Así las cosas, parece que la huelga de actores de Hollywood está lejos de terminar, y podría alargarse como poco hasta final de año, e incluso principios de 2024, con todas las consecuencias que ello conllevaría.
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