Call me by your name es una de las películas más bonitas de los últimos años, una historia de amor profunda, con dos personajes que traspasan la pantalla y basada en el libro homónimo escrito por André Aciman que se convirtió en un éxito de ventas. Pero cuatro años después, si analizamos algunas escenas desde otra perspectiva, nos damos cuenta de que la polémica que ha rodeado a Armie Hammer en los últimos tiempos afecta a la forma en las que las terminamos viendo.
Si no conocéis la historia que afecta a Armie Hammer, quien interpreta a Oliver en Call me by your name, os pongo en contexto:
Sabiendo que Armie Hammer podría practicar el canibalismo (aunque de momento no se ha confirmado), se ha viralizado en Twitter una escena de Call me by your name en la que el pie de Timothée Chalamet es objeto del fetiche del actor (bueno, realmente de Oliver, su personaje). Y claro, ¿qué ocurrecuando vemos esta secuencia ahora que sabemos todos los rumores que hay en torno a su persona? Y más cuando se ha revelado hace escasos días que dicha escena fue completamente improvisada por parte del intérprete...
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