Netflix continúa enfrascada en su objetivo de estrenar, como mínimo, una película original cada semana a lo largo de 2022. No creo que estos planes le duren mucho más allá de este año, pero mientras tanto, no dejamos de recibir largometrajes como Temporada de bodas que pasan desapercibidos, y que nunca pasarán a la historia del cine. Eso sí, en este caso, he de decir que me he sorprendido al encontrarme con una comedia romántica muy entretenida, no se ya si por tener ganas de acudir a una boda, o de organizar la mía propia.
Puedo comprender que muchos de vosotros estéis cansados de ver películas en Netflix, dado que en no pocas ocasiones, la plataforma de streaming recurre a la comedia y al drama como géneros predilectos. No por nada, simplemente porque son bastante más económicos que una cinta de acción, de ciencia ficción o de fantasía. Pero Temporada de bodas destaca dentro de este cajón de basura, y funciona como un buen postre a una mala comida.
En un intento por mantener alejados a sus padres obsesionados con el matrimonio, una mujer indio-estadounidense consigue un novio falso para acudir a la temporada de bodas que tiene por delante, pero al final, tiene el coraje de dejar de vivir una doble vida. ¿A que la premisa no es para nada una novedad? Una pareja 'falsa', que nace fruto de la necesidad, y cuyo final todos nos imaginamos. Lo positivo es que funciona, algo que no pueden decir otras comedias parecidas ya vistas en Netflix.
Su mayor error es que la trama es muy predecible, y basta con leer la sinopsis para saber dónde acabará todo. Algo que se solventa con buenas actuaciones y con diálogos frescos que se sitúan por encima de la media. Por otro lado, me ha gustado mucho la forma de representar la cultura india en esta comedia: con humor, pero sin resultar dañino. Por esto recomiendo Temporada de bodas a cualquiera que le guste este género, y a aquellas personas que no tengan nada que hacer este fin de semana.
Sorprendentemente (mentira), Tom Dey es el director de Temporada de bodas, responsable de comedias románticas como Novia por contrato (2006), y de un clásico de la acción y el humor como Showtime (2002), protagonizado por Robert de Niro y Eddie Murphy. Ahora se entiende un poco mejor la caspa...
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