Tras apenas tres capítulos, ya podemos decirlos bien alto: Mía es la venganza es un absoluto fracaso. Mediaset, una vez más, ha errado en el análisis que ha hecho de su programación. Los responsables de Telecinco creían que Sálvame era el problema de sus tardes, pero lo cierto es que Sálvame era el formato más estable de la cadena.
¿Cuáles han sido los datos de audiencia de Mía es la venganza? ¿Qué audiencia obtuvo Sálvame Límón en su última semana de emisión, en la misma franja de audiencia?
En tres días, Mía es la venganza se ha dejado por el camino 1,2 puntos de share y 150.000 espectadores. Son cifras muy preocupantes, sobre todo si este jueves 15 de junio la serie sigue bajando.
Si comparamos los datos de Sálvame Limón cosechados del lunes al miércoles pasado, en su última semana de emisión, notamos que Mía es la venganza ha empeorado 1,5 puntos de media el share y ha perdido más de 100.000 espectadores. ¿No se supone que los cambios son para mejorar datos?
Este es el primer intento de Telecinco de levantar la franja horaria vespertina. Si Mía es la venganza ha fracasado aún teniendo inmediatamente después a Sálvame Naranja, no quiero imaginarme qué ocurrirá cuando Así es la vida sustituya al formato del corazón de La Fábrica de la Tele...
Parece que la decisión de cancelar Sálvame es definitiva y no se podrá dar marcha atrás, pero es muy difícil que Mía es la venganza, Así es la vida, y a partir de septiembre el formato en el que trabaja Ana Rosa Quintana, puedan siquiera alcanzar los datos de audiencia de este programa histórico.
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