Si creciste jugando con una Game Boy Color a principios de los 2000, es muy probable que tuvieras o conocieras el legendario Pokémon Cristal. Lanzado en Europa en noviembre de 2001, este cartucho transparente con tonos azulados representaba el colofón final de la segunda generación de Pokémon, tras Oro y Plata. Lo que entonces compraste por unas 8.000 pesetas (aproximadamente 40-50€), hoy podría financiar la compra de una Nintendo Switch o incluso una Switch 2 si lo conservas en buen estado con su caja e instrucciones originales y no te digo ya si lo tienes precintado.
La versión española completa de Pokémon Cristal, con su característica caja de cartón e instrucciones, puede alcanzar en el mercado actual de coleccionismo precios que oscilan entre los 250€ y 600€, dependiendo de su estado de conservación. Y si por algún milagro conservas una copia precintada, su valor podría dispararse hasta los 1.500-2.000€, convirtiéndose en una inversión más rentable que muchas acciones bursátiles.
Pokémon Cristal no es simplemente una reedición con otro color. Se trataba del primer juego de la franquicia que permitía elegir el género del protagonista (chico o chica), incluía animaciones de los Pokémon al inicio de los combates, y presentaba nuevas tramas relacionadas con los legendarios Suicune, Entei y Raikou. Estas innovaciones, sumadas a que fue el último título de la segunda generación, lo convirtieron en un objeto de deseo para fans de la saga.
La escasez actual se debe principalmente a la fragilidad de su empaquetado original. Las cajas de cartón de los juegos de Game Boy Color solían acabar rotas o directamente en la basura, ya que muchos jugadores solo conservaban el cartucho.
Además, el paso del tiempo ha provocado que la pila interna del cartucho, necesaria para mantener las partidas guardadas y los eventos de tiempo, se agote en la mayoría de las copias, lo que hace que las unidades totalmente funcionales sean aún más valiosas para los coleccionistas.
No solo Pokémon Cristal ha experimentado esta revalorización. Otros títulos icónicos de Game Boy y Game Boy Color han alcanzado precios considerables en el mercado actual. The Legend of Zelda: Link's Awakening DX en su versión completa puede costar entre 150€ y 300€, mientras que rarezas como Metal Gear Solid: Ghost Babel en formato PAL pueden alcanzar valores similares.
El fenómeno es aún más extremo con juegos que tuvieron tiradas limitadas. Un ejemplo es Shantae para Game Boy Color, lanzado al final del ciclo de vida de la consola cuando la Game Boy Advance ya dominaba el mercado. Este título puede alcanzar precios astronómicos entre 800€ y 2.000€ si está completo. Más impresionante aún es el caso de Trip World, un oscuro plataformas lanzado para la Game Boy original en 1992, cuya versión europea puede costar entre 1.000€ y 2.000€ debido a su extremadamente limitada distribución.
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