El otro día tuve una Nintendo Switch en mi mano y pensé "joe, qué bonito tiene que ser tener el Animal Crossing: New Horizons aquí". Aunque bueno, jugué un rato a Kirby y la Tierra Olvidada, así que tampoco es que me pueda quejar mucho. Pero mi sueño, fantasía, ilusión o como queráis llamarlo es volver a ese pueblo (en este caso isla) y tener mi casita, mis vecinos y la hipoteca de por vida con la que sueño.
A ver, que todo esté en calma, porque todavía me da tiempo a hacerme con una Switch antes de que salga la próxima consola o un nuevo juego de Animal Crossing, así que todo perfecto. Mientras eso se hace realidad, pues seguiré sintiendo una envidia profunda por todos los que tenéis vuestra isla en Animal Crossing: New Horizons. Más os vale aprovecharla al máximo, porque ya se conoce la fecha en la que cada una de las islas serían inaccesibles.
¿Alguien va a seguir vivo para 2061? A ver, se supone que yo sí, pero no sé si a esa edad tendré todavía alguna consola en mi mano o si estaré durmiendo como una marmota.
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