Si te has criado en los años 90 o principios de los 2000 es imposible que no te cruzaras con un Tamagotchi. Tenía forma de huevito y, aunque intentabas cuidar al bicho con toda tu buena intención del mundo, lo más seguro es que más de una vez te lo encontraras... indispuesto cuando fuiste a darle comida.
Yo recuerdo que los Tamagotchi eran criaturas prácticamente sin forma, unas bolas de apenas unos pocos píxeles que no hacían más que quejarse. Pero la realidad es que la empresa que los fabrica ha colaborado con numerosas franquicias para lanzar dispositivos inspirados en ellas.
Si pensabas que los Tamagotchi se habían muerto tengo que decirte que estas muy equivocado. Lo cierto es que los dispositivos continúan generando furor a lo largo y ancho del mundo, aunque ahora lucen mucho mejor, con una pantalla más grande y mayor resolución. Eso sí, los píxeles continúan siendo tan grandes como puños. Yo creo que es parte de su encanto.
NOTICIAS RELACIONADAS