Esta vez sí. Ha ocurrido. Desde que hace dos semanas -en el episodio 2x03- se confirmase la presencia de Ahsoka Tano en "The Mandalorian", el público estaba ansioso por su primera aparición. El personaje es sin lugar a dudas uno de los más queridos de todo Star Wars pero, sin embargo, nunca se le había dado la oportunidad en el live-action. Su posición parecía "relegada" a las series de animación "Star Wars: The Clone Wars" y "Star Wars Rebels". Hasta ahora. Su ausencia en el episodio anterior había dejado algo fríos a los fans, así que la serie ha querido compensarlo con un episodio, titulado "La Jedi", en el que es la protagonista indiscutible.
Pero antes de entrar en materia recordemos un poco la trama. Mando y El Niño (Baby Yoda) tienen la misión de encontrar a Ahsoka para dejarla a cargo del pequeño. Tras ayudar a Bo-Katan y sus mandalorianos primero, y a Cara Dune y Greef Karga después, nuestros protagonistas se dirigen al planeta Corvus. Allí se reunirán al fin con Lady Tano y podrán descubrir más acerca del bebé. Una premisa que el episodio cumple sin rodeos.
Puro Dave Filoni
El capítulo está dirigido, como no podía ser de otro modo, por Dave Filoni. El director, que tuvo un breve cameo en el segundo episodio de la temporada, es la mente detrás de las dos series de animación anteriormente mencionadas. También ha estado fuertemente ligado a la propia "The Mandalorian" desde el principio. Con estos precedentes, tenía que ser él quien le diera la oportunidad de saltar a la acción real a su gran personaje. Y lo hace sin miramientos.
La filosofía deFiloni siempre ha estado muy clara: un profundo amor a lo más noble de Star Wars, dejarlo todo en favor de las emociones más básicas e intensas para conectar con los espectadores, y mandar a la porra ese proverbio cinematográfico que reza aquello de "sugerir es mejor que mostrar". Eso es lo que ha hecho en el decimotercer episodio de la serie, donde en la escena pre-créditos ya presenta a Ahsoka en medio de una batalla en un brumoso bosque. Así, de buenas a primeras, sin calentamientos previos para el público. Porque eso es Filoni y porque sabe que funciona. Claro, empezando así, el interés por el episodio ya está ganado.
El director no se guarda nada durante los 45 minutos que dura esta nueva entrega. Tras ese gran inicio, el capítulo va dejando diseminadas numerosas sorpresas y revelaciones de principio a fin para no quedarse a la deriva en ningún momento. Primero, a Mando se le ofrece una suculenta recompensa por matar a Ahsoka: una lanza de Beskar, metal mandaloriano que el Imperio distribuyó por toda la galaxia y que los nativos del planeta ansían recuperar. Después, una vez que Mando y Ahsoka se encuentran y se alían, llega la gran bomba: el verdadero nombre de Baby Yoda y su pasado. Se dan aquí varias conexiones con la trilogía de precuelas: el Maestro Yoda, Anakin, el Templo Jedi de Coruscant, el ataque a la Orden por parte de Darth Vader y Palpatine...
Casi al final se descubre que Ahsoka está buscando al Almirante Thrawn, uno de los villanos principales de "Star Wars Rebels". Por último, se deja una pista abierta para el futuro de la serie: Mando debe llevar a Baby Yoda (aka Grogu) a un antiguo templo donde otros Jedi quizá sientan su presencia y le busquen. Algo muy revelador ya que, además de Ahsoka, solo se tiene constancia de dos Jedi en el momento en que discurre "The Mandalorian": Luke Skywalker y el desaparecido Ezra Bridget. Esto, evidentemente, invita a teorizar sobre la vuelta del joven Bridget a Star Wars. O quizá sea el mismísimo Luke quien vaya a buscar al pequeño en su misión por reconstruir la Orden Jedi.
En resumen, Filoni ha querido seguir su característico ritmo frenético y ha dejado un buen puñado de recompensas a los fans de la saga. El estilo del director es inconfundible y ha conseguido un capítulo muy personal y agradecido en su tercera intromisión en la acción real (ya dirigió el primer y quinto capítulo de la primera temporada).
Larga vida a Ahsoka
Como decíamos, Filoni le ha regalado a su personaje un episodio entero para ella. Ahsoka se hace con el control del metraje desde el primer instante y hace que la trama del capítulo gire en torno a ella y a su conflicto con la aldea que pretende liberar. No se escatima en ningún momento con peleas empuñando sus dos icónicas espadas láser, mostrando además sus movimientos habituales de las series animadas. Una serie de detalles que acaban resultando un absoluto disfrute tanto para quienes ya la conocen como para los que es la primera vez que la ven en acción.
Además de esa feroz faceta como guerrera, su ternura queda plenamente plasmada gracias a la brillante actuación de Rosario Dawson. La actriz neoyorkina era una de las apariciones más esperadas de la temporada y ha estado a la altura de la serie y de la importancia de su personaje para la saga Star Wars. Quizá no vuelva a aparecer nunca más ya que el episodio deja claro que no se encargará de entrenar a Grogu, por lo que su relevancia en la serie parece que ha concluido. Pero lo que está claro es que Dawson es una elección perfecta para darle a Ahsoka el tributo que merecía. Y, si vuelve, se la recibirá con los brazos abiertos.
Star Wars, ni más ni menos
Cuando se habla de Star Wars, en la cabeza se aglutinan una gran cantidad de ideas y conceptos. Sin embargo, hay algo inherente a todo ello. Algo que nace de dos géneros cinematográficos muy tradicionales como son el western y el cine de samurais. Esas tramas con tintes políticos y heroicos, ese juego de tempos entre acción y reflexión, esa capacidad de evocar conceptos épicos con imágenes simples y poderosas, esa lucha entre el bien y el mal llena de trampas y claroscuros... Y esa base, tan sencilla y compleja al mismo tiempo, es entendida mejor que nadie por dos personas: George Lucas, padre y creador de la franquicia, y Dave Filoni, su fiel discípulo.
Y como tal, este episodio, "La Jedi", hace un barrido para regresar a dichas raíces. Esa narrativa en la que un forastero ayuda a un héroe local en su lucha por liberar una aldea de las opresoras garras de unos villanos que se aprovechan de su población es heredera directa del cine de Akira Kurosawa. Incluso la ambientación del pequeño pueblo recuerda a tales películas gracias a su arquitectura de estilo oriental. No hacen falta naves espaciales ni grandes armas de destrucción masiva reventando planetas, la esencia de Star Wars está aquí, lo demás es puro artificio. Y llegar a desnudar y mostrar esa sencillez con tanto cariño como lo hace Filoni es un logro a la altura de muy pocos.
Conclusión
El episodio 2x05 de "The Mandalorian", el decimotercero en el cómputo total de la serie, es una maravilla que devuelve al espectador al Star Wars más puro y honesto. El capítulo, además de saldar la deuda pendiente que tenía la saga con el personaje de Ahsoka Tano, deja una gran cantidad de revelaciones que sirven tanto para dar contexto a los personajes como para empezar a dibujar su destino más próximo. Un verdadero disfrute especialmente para los fans de las precuelas y de las series animadas. Todo ello con un ritmo muy natural que eleva la pieza a la altura de los mejores episodios de la serie y, por ende, a lo más alto de Star Wars.
El episodio 2x05 de "The Mandalorian", el decimotercero en el cómputo total de la serie, es una maravilla que devuelve al espectador al Star Wars más puro y honesto. El capítulo, además de saldar la deuda pendiente que tenía la saga con el personaje de Ahsoka Tano, deja una gran cantidad de revelaciones que sirven tanto para dar contexto a los personajes como para empezar a dibujar su destino más próximo. Un verdadero disfrute especialmente para los fans de las precuelas y de las series animadas. Todo ello con un ritmo muy natural que eleva la pieza a la altura de los mejores episodios de la serie y, por ende, a lo más alto de Star Wars.
Ahsoka Tano
Esencia del mejor Star Wars
Trama llena de revelaciones
Conexiones y guiños con otros productos de la saga