La aclamada serie de AMC, Better Call Saul, se ha convertido en la gran olvidada de los Premios Emmy, a pesar de sus impresionantes 53 nominaciones a lo largo de su trayectoria. A pesar de los esfuerzos y la calidad evidente de la producción, la serie no ha logrado llevar a casa ninguno de los codiciados premios Emmy. Este fenómeno se ha vuelto aún más evidente durante la 75ª edición de los Emmy, donde Better Call Saul estaba nominada en siete categorías, pero, lamentablemente, no obtuvo victoria alguna.
Las categorías en las que la serie competía eran diversas y abarcaban desde mejor serie dramática hasta actuaciones individuales destacadas. Bob Odenkirk, quien da vida al astuto abogado Saul Goodman, aspiraba al premio al Mejor Actor Principal, mientras que Rhea Seehorn, en el papel de Kim Wexler, competía por el galardón a la Mejor Actriz de Reparto. Además, la serie tenía representación en categorías técnicas como mejor guionista de serie dramática, mezcla de sonido, comedia corta y edición de imagen.
A pesar de su brillante elenco, trama cautivadora y un equipo de producción liderado por Vince Gilligan y Peter Gould, Better Call Saul se encontró con una dura competencia en la edición de los Emmy dominada por otras producciones destacadas como The Bear de FX, Succession de HBO y Beef de Netflix. Aunque la serie ha sido nominada en siete ocasiones consecutivas como Mejor Serie Dramática, la estatuilla dorada sigue evadiendo al drama legal que sirve como precuela de la exitosa Breaking Bad.
La serie, que sigue las peripecias de Jimmy McGill antes de convertirse en el conocido Saul Goodman, ha sido elogiada tanto por la crítica como por los fans, pero curiosamente, no ha logrado replicar el éxito de su predecesora Breaking Bad en los Emmy. Mientras Breaking Bad se alzó como una de las mejores series de televisión de todos los tiempos y cosechó un total de 16 victorias, Better Call Saul parece enfrentarse a una extraña maldición en la prestigiosa ceremonia de premios.
Y es que, a pesar de la diferencia en premios, ambas series han sido nominadas un número similar de veces, con 58 nominaciones para Breaking Bad y 53 nominaciones para Better Call Saul. De esta manera, resulta aparente que ambas series son de muy alta calidad, pero que el spin-off no ha llegado a eclipsar a sus contemporáneas de la misma forma que lo hizo la original.
En realidad, la principal razón de que Better Call Saul se quedara sin ninguna estatuilla es que ha tenido una competencia más dura que Breaking Bad. Después de todo, el actual panorama del streaming está fomentando que se produzcan más series que nunca y el reciente auge de nuevas plataformas también aporta más producciones que pueden competir en términos de calidad. Así, series como Succession o The Bear han logrado destacar por encima del spin-off y hacer que finalmente no logre hacerse con ningún Emmy.
A pesar de este desafío, Better Call Saul ha dejado una marca indeleble en la cultura televisiva, gracias a la interpretación magistral de Bob Odenkirk y el talentoso elenco que le acompaña. Aunque los Emmy han sido esquivos, la serie sigue siendo reconocida como un logro significativo en la narrativa televisiva contemporánea que siempre tendrá un lugar en el corazón de los fans. Solo el tiempo dirá si esta gran olvidada logrará finalmente obtener el reconocimiento que muchos creen que merece.
CONTENIDO RELACIONADO
Disney quiere aterrorizarnos durante el verano del 2025
La ambiciosa precuela ha aterrizado en la plataforma con un primer episodio muy prometedor
Esta ambiciosa precuela de las películas ha llegado a la plataforma sin hacer mucho ruido, pero tiene potencial
A medida que se acerca la Navidad el gigante del streaming prepara proyectos muy interesantes
Pese a que la recepción crítica de las temporadas recientes ha sido peor, la comedia vuelve a la carga
'Una historia de crímenes' es una docuserie a cargo de Marlasca, Patricia Abet y Miguel Lorente