Me sigue sorprendiendo muchísimo la cobertura que los medios de comunicación hemos hecho de un evento como la desaparición del sumergible Titán. Sobre todo, porque día a día mueren decenas de personas en el Mediterráneo y rara vez ocupan un titular en los informativos. Pero más allá de este curiosidad, me ha impactado la similitud que existe entre la implosión de este submarino y la que se ve en The Abyss, una de las mejores películas de James Cameron, y probablemente la más desconocida.
The Abyss es una película dirigida por James Cameron y estrenada en 1989 en cines que solo cosechó 90 millones de dólares en todo el mundo. Sí, fue un fracaso porque costó 70 millones de dólares, pero algunas de sus secuencias siguen en mi retina, como esa implosión que sufre el submarino que controlaba el personaje de Hiram Coffey.
En esta secuencia, primero vemos cómo uno de los equipos de la expedición se queda al borde de una grieta abismal. El actor Michael Biehn, que da vida a Hiram Coffey, tiene que luchar por controlar el sumergible, que sigue cayendo de forma imparable al abismo. Conforme se va hundiendo, el cristal del pequeño submarino se va rompiendo a consecuencia de la presión, y finalmente, sufre una implosión similar a la que habría provocado la muerte de los 5 ocupantes del Titán semanas atrás.
Más allá de esta sorprendente escena, que parece predecir el destino del sumergible Titán 34 años después, The Abyss es una película de James Cameron más que recomendable por secuencias como esta. El director se las ingenió para dar forma a una cinta de ciencia ficción imaginativa, con algunas escenas memorables y que ayudó al cineasta a trabajar en un futuro en la maravilla que es Titanic.
La clave de The Abyss es la asfixiante puesta en escena: al estar ambientada gran parte de la película en lo más profundo del océano, el espectador se topará con unas localizaciones agorafóbicas que funcionan muy bien en pleno 2023 a pesar de los casi 35 años que tiene la cinta a sus espaldas.
Más allá de su puesta en escena, The Abyss también funciona gracias a un guion que parte de una premisa de ciencia ficción que apuesta por un realismo casi total en la primera mitad. Es cierto que el final de The Abyss se topa con un obstáculo habitual en el cine de James Cameron: la sensiblería. Sin embargo, si le perdonamos ese cierre que no satisface las expectativas, estamos ante una cinta de lo más creíble dentro del universo que presenta.
The Abyss no está disponible en plataformas de streaming pese a ser una película de James Cameron. Si quieres disfrutar de esta cinta de ciencia ficción, aún puedes comprar su edición de lujo en DVD en tiendas como Amazon.
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