Si hay una persona del mundo del cine que siempre ha sido blanco de alabanzas gracias a su peculiar y buena manera de ser ese es Keanu Reeves. Sus colegas de profesión siempre han asegurado que el actor es una de las mejores personas que conocen. De hecho, hace unas semanas, su doble de acción en "John Wick" le dedicaba estas bonitas palabras al bueno de Keanu, quien parece que nunca tiene fin para sus buenas y bien avenidas acciones, muy agradecidas en un mundo como este en el que ser buena persona está muy relativizado.
Ahora ha sido Winona Ryder la última en contar una nueva anécdota de este tipo sobre Keanu Reeves: una curiosa situación que ocurrió en el roda de "Drácula, de Bram Stoker", una película dirigida por Francis Ford Coppola. De hecho, según contaba Ryder al medio The Sunday Times, el director también estaba involucrado y es que, según la actriz, Keanu Reeves se negó insultarla a pesar de la orden clara y consisa del italoamericano a hacerlo.
"Para que todo el mundo pueda entenderlo, en esa escena se suponía que yo debía estar llorando junto a Richard E. Grant, Anthony Hopkins, Keanu Reeves. Francis Ford Coppola empezó a intentar que todo el mundo me gritaran cosas con el único fin de hacerme llorar. Keanu no lo hizo, se negó a decirme nada. No funcionó su plan", aseguraba la actriz, que aseguraba que algunos de sus compañeros empezaron a gritarle descalificativos como 'puta' o 'zorra'.
Keanu Reeves y Winona Ryder siempre han tenido una gran amistad, que se acrecentó en películas en las que trabajaron juntos como "Una mirada a la oscuridad" o "La vida privada de Pippa Lee".
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