Podría acabar en el espacio, en televisión, en el sofá de su casa, o incluso en callejones oscuros. Los rumores en torno a su próxima película no han dejado de sucederse desde que asegurara estar en la recta final de su carrera. Quentin Tarantino llegó a sugerir que podría retirarse si "Érase una vez... en Hollywood" triunfaba a un nivel determinado, pero lo cierto es que sigue teniendo demasiadas ofertas sobre la mesa. ¿Star Trek? ¿Una serie de Rick Dalton? ¿La saga Kill Bill contó como dos películas y ya ha cumplido su cupo?
El director podría terminar saliéndose por la tangente. En una reciente entrevista para el medio español Sensacine, el cineasta jugueteaba por primera vez con un género hasta ahora descartado de la ecuación. "Si doy con una buena historia de terror, haré de ella mi última película", confesaba durante la premier de su último trabajo en Roma. "Amo las películas de terror y me encantaría hacer una". Y de hacerlo, no sería su primer contacto con el género".
"Creo que la secuencia de Spahn Ranch de 'Érase una vez... en Hollywood' es lo más cercano que he hecho a una secuencia de terror", añadía sobre la incursión del personaje de Brad Pitt en el recinto donde convivía la familia Manson a finales de los 60. "Es confusamente terrorífica. Y para serte sincero, ni siquiera me di cuenta de lo bien que lo hicimos en su día. Fue mi montador quien me lo dijo; 'la secuencia [de Spahn Ranch] sí que es puro terror. Es 'La matanza de Texas' pero con presupuesto'".
Más pasión que lógica, "Érase una vez… en Hollywood" es el retrato encarnado de un director enamorado con el pasado. Ni nazis esperpénticos, ni vaqueros del Lejano Oeste, ni mafiosos recalcitrantes. Quentin Tarantino abandona toda referencia narrativa para atarse...
¿Terminará Tarantino atreviéndose con algo así? Lo cierto es que sea una película de terror, una nueva entrega de Star Trek, o incluso una tercera parte de Kill Bill, lo cierto es que llevaría el inconfundible sello de su particular estilo. Hasta que esa respuesta llegue, habrá que conformarse con disfrutar de una de sus películas más honestas y arriesgadas de la última década.
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