Que Netflix quiere convertirse en la plataforma del cine de acción parece un hecho. “6 en la Sombra”, “Tyler Rake”, “Alerta Roja”… Y ahora “El Agente Invisible”. Y oye, yo que me alegro, que es un tipo de cine que me encanta y que suele estar muy maltratado. En esta ocasión, la compañía ha metido la friolera de 200 millones de dólares y ha cogido de protagonistas a Chris Evans, Ryan Gosling y Ana de Armas. Y para rematar, como directores están los hermanos Russo, cabecillas de “Vengadores: Endgame” y otro puñado de cintas de Marvel. Vaya, lo que viene a ser un all in.
“El Agente Invisible” cuenta la historia de Sierra Seis, un agente secreto de la CIA especializado en misiones de eliminación. Es decir, de borrar del mapa a los tipos incómodos para Estados Unidos. Pero en una misión, Seis descubre unos turbios y peligrosos secretos que involucran a su jefe, y su moral le obliga a intentar sacarlos a la luz. Para evitarlo, la CIA contrata a Lloyd, otro ex-agente que duró en el servicio sólo un mes por sus métodos inmorales, psicópatas y de tortura. Empieza así una cacería mortal por todo el mundo.
La premisa es interesantísima. Puro thriller de acción de los 90. Y el reparto es tan potente que es imposible no interesarse en la película. Más si, como yo, veis cualquier película del género que os echen encima. Pero por desgracia la mayoría de promesas que hace “El Agente Invisible” se quedan sin cumplir, o sólo se cumplen a medias. Y es que se nota mucho que los Russo han querido recoger un montón de influencias de grandes cintas de acción para, a partir de ahí, poner el piloto automático.
En “El Agente Invisible” vemos un poquito de “James Bond”, otro poco de “Jason Bourne”, una pizca de “Misión Imposible” e incluso de “Fast and Furious”, y hasta (aunque mucho menos logrado) una migaja de las violentas coreografías de “John Wick”. Pero claro, querer parecerse a tantas cosas solo hace que la película se quede en una especie de tierra de nadie. No tiene el carisma ni la personalidad de ninguna de ellas, y es una verdadera lástima.
Creo que el sello de los Russo se nota menos de lo que debería precisamente por eso. No hay rastro de esas escenas de pura emoción que si había en Marvel y que levantaban cualquier momento bajonero. Todo es demasiado “lo de siempre”, y una propuesta tan ambiciosa como “El Agente Invisible” debería de ser algo más. De hecho, el guion está tan poco cuidado que la trama se hace a ratos incluso aburrida porque los personajes conectan mucho menos de lo esperado con el espectador. A mí, al menos, no consiguió involucrarme salvo en 4 momentos contados.
Lo mejor de “El Agente Invisible” son sus escenas de acción, donde sí se nota el enorme presupuesto que Netflix ha metido para que los Russo pueden brillar como saben. No es que sean la nueva maravilla del cine ni sienten cátedra para el futuro, pero están realizadas de manera bastante espectacular. Y su trío protagonista está genial. Se nota mucho que Chris Evans se lo pasó muy bien haciendo de villano psicópata. Está desatado. También Ana de Armas, que cada vez que aparece para dar cera a alguien demuestra que ha venido a este género para consagrarse como una de las grandes actrices del cine de acción moderno. Y Ryan Gosling otra cosa no, pero poner cara de intenso, meter disparos y corretear de un lado a otro lo sabe hacer de perlas.
Gracias a todo esto, “El Agente Invisible" consigue salir adelante y caer más o menos de pie. Al menos lo suficiente como para entretener y, seguramente, triunfar en Netflix. Porque con los ingredientes que tiene, solo puede petarlo. Y cuando esto ocurra seguramente den luz verde a alguna especie de secuela o spin-off, porque tienen suficientes hilos de los que tirar para seguir explotándola si les apetece.
Como veis, personalmente yo esperaba mucho más de “El Agente Invisible”. Es entretenida y a ratos espectacular, pero no va más allá. Es cierto que sus escenas de acción y su reparto son geniales, pero su historia es tan vacía y carente de personalidad que su conformismo con lo mediocre duele un poco. También es bastante probable que todo esto sea una opinión viciada por mis altas expectativas con ella, así que al menos dadle una oportunidad. Recordad que ya puede verse en algunos cines seleccionados y que se estrena en Netflix el próximo 22 de julio.
Como veis, personalmente yo esperaba mucho más de “El Agente Invisible”. Es entretenida y a ratos espectacular, pero no va más allá. Es cierto que sus escenas de acción y su reparto son geniales, pero su historia es tan vacía y carente de personalidad que su conformismo con lo mediocre duele un poco. También es bastante probable que todo esto sea una opinión viciada por mis altas expectativas con ella, así que al menos dadle una oportunidad. Recordad que ya puede verse en algunos cines seleccionados y que se estrena en Netflix el próximo 22 de julio.
Sus escenas de acción
Chris Evans desatado
Ryang Gosling y Ana de Armas como héroes de acción
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