Amy Hennig, ex Naughty Dog y ahora enfrascada en el desarrollo junto a Visceral Games y EA de un nuevo Star Wars, ha dejado importantes declaraciones en una reciente entrevista. La creativa ha afirmado que el modelo actual de producción de juegos triple A puede llegar a destruir a la gente por las condiciones en las que se trabaja.
Durante su época en Uncharted, asegura que estuvo meses trabajando 80 horas semanales, el doble de lo permitido actualmente en la legislación española, siendo especialmente duro el momento en el que Naughty Dog dividió a sus trabajadores en dos grupos que se encargarían del desarrollo de Uncharted 3 y The Last of Us de forma conjunta.
"En todo el tiempo que estuve en Naughty Dog (diez años y medio) no sé si llegué a trabajar menos de 80 horas a la semana", explicó Hennig. "A veces había excepciones en las que nos tomábamos un par de días libres, pero básicamente trabajaba los siete días de la semana doce horas al día".
Hennig denuncia así estos abusos y asegura que no "vale la pena" los esfuerzos dedicados a estas compañías para perder vida familiar o no alcanzar a ver crecer a tus propios hijos.
"No creo que merezca la pena trabajar en un juego triple A" "Tienes niños que están creciendo sin verlos. Mi salud realmente empeoró y tuve que cuidarme porque estaba realmente mal. Y hubo gente que llegó a desmayarse o que tuvo que ir a hacerse un análisis en algún sitio cuando los juegos estaban terminados. O que se tuvieron que divorciar. Eso no está bien, nada de eso. No merece la pena". "Tenemos que actuar como una industria y el problema no hace más que crecer...Está destruyendo a la gente".
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