Siempre que hay una moda dentro del mundo de los videojuegos me siento empujado como hacia algo inevitable por cómo se ha movido el medio en los últimos años: un juego apareció con lootboxes y todos comenzaron a implantar ese tipo de estrategias; Bethesda sacó una skin para un caballo en Oblivion en 2006 y las skins se han convertido en el pan de cada día, por poner algunos ejemplos. Pero lo cierto es que la moda de las NFTs es algo más particular que el resto.
La sensación que me da esto último nace a raíz de que entiendo que la gente se canse de algo cuando están intentando convencerle constantemente de que les merece la pena sin saber defender bien por qué. Y eso es justamente lo que creo que está pasando con las NFTs: las compañías de videojuegos insisten en tener ganas de hacer algo con ellas... hasta una j*dida consola.
Si tuviera que acabar este artículo con tan solo cuatro palabras, creo que ya las elegí conforme os iba contando las características de esta consola de NFTs: ''permitidme que lo dude''.
CONTENIDO RELACIONADO
Un duelo de equipos que no pueden perder, uno para luchar por lo más alto y otro por no caerse al pozo, distintos motivos misma meta: ganar
Juan vs Gerard, dos equipos que nunca han tenido choques pero que cuando se cruzan lo dan todo
Los Macarras contra Casillas y Mayichi se cruzan en un momento delicado para ambos clubes
Dos equipazos se enfrentan en un choque estilístico, ambos quieren controlar el encuentro pero solo se juega al ritmo que dictamina uno de los dos
El denominado partido de la siesta terminó siendo un recital para los Porcinos de Ibai
Kunisports tuvo un pequeño susto pero finalmente han conseguido llevarse el encuentro ante un Rayo que ha puesto mucho corazón