A lo largo de los últimos años, cada vez más son los desarrolladores y desarrolladoras que comparten sus experiencias negativas dentro de la industria. Abusos, explotación, conductas inadecuadas, entre otras situaciones, han sido denunciadas por profesionales de toda índole, permitiendo visibilizar el alto grado de toxicidad que, desafortunadamente, alberga el medio interactivo. Así, se han encontrado declaraciones alusivas a estudios grandes y pequeños por igual, y ahora es Rocksteady, el equipo tras la saga Batman: Arkham, la que está una vez más en el ojo del huracán.
En este sentido, The Guardian reporta que, en 2018, 10 de las 16 mujeres que formaban parte del estudio en aquella época firmaron una carta para los jefes de la compañía en la que denunciaban haber sufrido casos de sexismo, abusos y comportamientos inapropiados en las oficinas del equipo. Sin embargo, según lo indicado por la fuente en cuestión, han transcurrido dos años y una fuente anónima asegura que, más allá de un seminario de concientización sobre tales tópicos, los ejecutivos de la empresa no han tomado acción alguna para cambiar el contexto.
"He escuchado de todo, desde toqueteos inadecuados hasta incidentes que involucraban staff ejecutivo, los cuales todos son hombres", declaró la empleada anónima. "Y, sin embargo, lo único que hemos recibido como resultado [de las exigencias de 2018] ha sido un seminario para la compañía que duró una hora. Se le solicitó a todos los asistentes que firmasen una declaración confirmando que habían recibido el entrenamiento. Se sintió como que era solo una forma para ellos de cubrirse los traseros", añadió.
Posteriormente, hizo referencia al sexismo que Rocksteady logra evidenciar incluso en sus videojuegos, ofreciendo representaciones irreales de las mujeres a través de personajes como Poison Ivy y Harley Quinn. Empero, reconoció que el "97%-98%" de los desarrolladores del estudio son personas increíbles, y que es injusto que tales coyunturas se encarguen de arruinar la visión que se tiene sobre el conjunto.
En última instancia, Rocksteady afirmó que, tras lo acontecido en 2018, están trabajando por ejecutar soluciones sobre los problemas que se denunciaron y que, en 2020, "estamos más comprometidos que nunca a desarrollar nuestra cultura inclusiva, y estamos determinados a responder por todo nuestro staff". Para finalizar, prometieron desarrollar nuevas iniciativas para evitar más discriminaciones, aunque se mantuvieron al margen de definir qué programas dispondrán para mejorar la coyuntura laboral.
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