Anoche fue presentado Yakuza: Like a Dragon (título oficial para su versión en Occidente) y, además de continuar con un nuevo personaje la franquicia, supone el cambio más radical al que se ha enfrentado la marca: se aleja de la acción más radical para acercarse, aún más, al género JRPG más tradicional con un combate por turnos que no ha convencido a todos en su anuncio. Y es que, recordamos, Yakuza siempre ha sido una saga en la que se mezcla la exploración con un combate lleno de acción y táctica.
Tras el revuelo inicial, Takashi Mochizuki, conocido periodista de The Wall Street Journal, ha querido tranquilizar a sus lectores con unas palabras que provienen del mismísimo Toshihiro Nagoshi, productor y diseñador de SEGA: "el formato clásico del juego en Yakuza alcanzó un estilo completo, por lo que quería probar algo completamente diferente. Nuestros expertos en creación de juegos de acción crearon este videojuego de rol con su propio sabor. Espero que los seguidores den la bienvenida a este cambio. Si no, estaré feliz de volver al juego de acción para futuros lanzamientos".
Por lo tanto, parece ser que es una decisión creativa: se ha llegado a un límite de innovación en el género y van a intentar con una vuelta de tuerca que, de no funcionar, retornaría al sabor más clásico de la acción.
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