¿Cómo de poderosas son las Bolas de Dragón de Dragon Ball? Reglas y limitaciones de sus deseos

Las Bolas de Dragón, creadas por Akira Toriyama en la icónica serie "Dragon Ball", son un elemento fundamental y uno de los símbolos más reconocibles del anime. Estas esferas doradas, con estrellas grabadas que indican su número, pueden conceder deseos a quien logre reunirlas todas. Este poder es codiciado por tanto héroes como villanos y ha sido una pieza fundamental de la mayoría de las narrativas y conflictos de toda la saga y sus distintos arcos argumentales.

A lo largo de la historia, los personajes han viajado por la Tierra, Namek y otros planetas en busca de estos objetos, que se convierten en piedra tras usarse y se dispersan por el mundo. Sin embargo, aunque su función es sencilla a primera vista, las reglas y el poder que poseen pueden variar significativamente según el conjunto de Bolas de Dragón y el dragón asociado a ellas. A continuación, encontrarás las reglas comunes que suelen tener los deseos, así como las limitaciones que tiene cada uno de los conjuntos y su Dragón Eterno:

Las reglas comunes de las Bolas de Dragón

Un aspecto esencial de las Bolas de Dragón es que no existe un único conjunto, sino que hay diferentes versiones creadas por los namekianos en distintos planetas. Todas comparten características comunes: al reunirlas, se invoca a un Dragón Eterno que concede deseos (pudiendo conceder como mínimo 1 deseo), y después las esferas se dispersan. Pero las diferencias se vuelven evidentes cuando se analizan los dragones y los deseos que pueden conceder. 

Por ejemplo, Shenron, el dragón de las Bolas de Dragón de la Tierra, tiene ciertas limitaciones, como no poder matar a personas o conceder el mismo deseo dos veces. Mientras tanto, dragones como Porunga, de Namek, pueden conceder tres deseos, aunque con reglas y restricciones propias, como que los deseos sólo pueden expresarse en lengua namekiana. De esta manera, cada Dragón Eterno tiene su propia manera de funcionar y sus propias reglas a la hora de conceder deseos.

Reglas de Shenron, el dragón de la Tierra

A lo largo de la serie, las Bolas de Dragón han evolucionado, especialmente las de la Tierra. Inicialmente, Shenron solo concedía un deseo, pero con el tiempo, y gracias a la intervención de Dende al convertirse en el nuevo guardián, el dragón adquirió la capacidad de otorgar hasta tres deseos. Sin embargo, el poder de estos deseos sigue estando limitado por la fuerza del propio Shenron, lo que significa que ciertos deseos complejos, como revivir a todas las personas de la Tierra, podrían requerir más energía y reducir el número de deseos posibles. Además, este dragón tiene las siguientes reglas: no puede matar, no puede conceder el mismo deseo dos veces y no puede forzar a dos personas a enamorarse.

Las reglas y limitaciones de Porunga, el dragón namekiano

Otro ejemplo interesante es el de las Bolas de Dragón Namekianas, que fueron las primeras capaces de conceder múltiples deseos. Aunque se parecen a las de la Tierra en cuanto a sus reglas y límites, las Bolas de Dragón de Namek son más grandes y pueden conceder tres deseos a la vez, pero el poder de cada uno es menor en comparación con el único deseo que concedía Shenron al principio. Sin embargo, tienen varias ventajas sobre las bolas terrestres, ya que no tienen la limitación de los deseos repetidos y no se redistribuyen tras su uso.

Reglas y limitaciones de Trombo, el dragón ceresiano

Finalmente, existen versiones más recientes y exóticas, como las Bolas de Dragón del Planeta Cereal. Este conjunto solo consta de dos esferas, lo que facilita la tarea de reunirlas, pero su poder es sorprendentemente alto. Trombo, el dragón que habita en ellas, ha demostrado ser capaz de conceder deseos que incrementan el poder de una persona hasta niveles superiores al de otros dragones, aunque a costa de la longevidad del solicitante. Esta mecánica única muestra cómo las Bolas de Dragón pueden variar en función del planeta, el creador y las reglas que los namekianos decidan establecer.