Ya sabíamos que El Desenlace del Ladrón sería la última entrega de la saga Uncharted protagonizada por Nathan Drake, pero hasta ahora desconocíamos las razones exactas de esta decisión.
Según ha contado Robert Cogburn, el diseñador principal de esta nueva entrega, a Kotaku, este tipo de juegos son realmente complicados de hacer. Dice que especialmente lo es por tener un personaje como Nathan Drake en un mundo con los pies en la tierra y que "es un desafío considerando cuánto hemos expandido su mundo mientras nos manteníamos firmes con este tipo de reglas". Asegura que como estudio están algo cansados de responder a las mismas cuestiones en el mismo universo una y otra vez, ya que esta es la cuarta vez que se enfrentan a preguntas como las de escalar la experiencia de combate, qué puzles pueden introducir, etc.
Era de esperar que juegos de este calibre con cada entrega sean más y más difíciles de diseñar, y es de agradecer que un estudio decida parar antes de no realizar un juego a la altura de la franquicia. ¿Qué opináis vosotros de esta decisión?
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