Riot Games es la compañía que está detrás del gran fenómeno mundial para ordenadores League of Legends. La apuesta de la compañía por desarrollar un nuevo MOBA gratuito inspirado por el legendario mod Defense of the Ancients para Warcraft III -el DOTA original-, ha sido uno de los grandes movimientos de la industria de los videojuegos en los últimos años. Su éxito no solo se refleja en sus millones de jugadores sino que también es uno de los grandes referentes en el terreno de los eSports. Pues bien; si existen motivos que puedan ensuciar toda esta ambición y éxito, estos han sido las conocidas políticas del estudio hacia sus propios trabajadores, especialmente hacia las mujeres, razones principales por las que la compañía ha estado en múltiples ocasiones en el punto de mira de la prensa.
Según informa el medio GamesIndustry.biz, la última de las polémicas de Riot Games no nace de sus empleados y sus condiciones laborales, sino de la manera en la que la organización está manejando una polémica especialmente sensible para la comunidad de jugadores. Todo comenzó hace un par de meses cuando el fundador y propietario del club Echo Fox, Rick Fox -quien además es una legendaria estrella de la NBA retirada-, amenazaba con dejar la organización de los eSports por unos comentarios supuestamente racistas de uno de sus propios y principales accionistas, Amit Raizada. Tal y como explicó hace unos meses el medio especializado en eSports Dexerto, Raizada se dedicó a enviar insultos racistas y antisemitas tanto a Rick Fox como al ex CEO del equipo Jace Hall en lo que parecía una serie de amenazas bastante virulentas por simples motivos laborales.
Cuando esta situación se hizo pública, la organización de la LCS -encargada del campeonato y de las ligas de League of Legends- amenazó a Echo Fox con solucionar y revertir dicha situación en 60 días, o se tomarían decisiones que pondrían en peligro la participación del equipo Echo Fox en cualquiera de sus competiciones. Desde entonces, han pasado los 60 días establecidos en los que Rick Fox ha luchado de manera activa por eliminar a Raizada de la junta de accionistas del equipo sin ningún tipo de éxito, aunque tal y cómo hemos conocido hoy a través de la cuenta oficial de Twitter de League of Legends, este plazo de 60 días se ha ampliado a 7 más gracias a un intercambio de opiniones con Echo Fox. Por lo tanto, Echo Fox tendría ahora 7 días adicionales para expulsar a Amit Raizada o podrían verse en serios problemas respecto a participación en cualquier evento oficial de League of Legends.
Sin embargo y todo sea dicho, esta decisión de aumentar el plazo 7 días también ha levantado la polémica en la comunidad del popular MOBA para ordenadores, y es que muchos jugadores condenan la flexibilidad de la compañía a la hora de tratar esta polémica con un racista supuestamente declarado y tóxico para la imagen de la organización.
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