La empresa californiana de Reed Hastings volverá a tomar la delantera el próximo año. Desde que revolucionara el mercado del streaming con su expansión mundial, Netflix se ha visto envuelta en un mercado cada vez más competitivo y con más rivales con los que batirse. El derecho de las series está cada vez más fraccionado y se hace complejo construir un catálogo de calidad y con cierta estabilidad. Es por eso que la compañía se planteó el pasado año comenzar a competir en la liga superior, con sus propias películas originales. Bestias sin patria o la reciente "Okja" demuestran la intención de Netflix por abordar una transición hacia el contenido propio, en un planning que resulta ser mucho más ambicioso de lo que se creía en un primer momento.
El mercado ha cambiado mucho desde que "House of Cards" o "Orange Is The New Black" llegaron a la plataforma, y las últimas cancelaciones lo prueban. Los altos presupuestos no terminan de compensar unas cifras de beneficios y audiencia desconocidas, pero a todas luces insuficientes. No obstante el 2018 será un punto de inflexión para la compañía, que ahora se marca como reto aumentar el número de las 50 películas estrenadas este año, haciendo una inversión multimillonaria y nunca vista en la industria del streaming.
El director de contenidos Ted Sarandos reveló en la reunión de inversores del pasado lunes (vía Variety) que Netflix se marca como objetivo para 2018 estrenar 80 películas originales con un gasto aproximado de 8 mil millones de dólares. Entre ellas habrá incluidas comedias, dramas, anime, cintas de acción, extranjeras, y documentales.
Algunas de las primeras películas no esperarán al próximo año para llegar a la plataforma. "Bright" el thirller de acción dirigido por David Ayer ya ha triunfado en Sundance y será la primera producción de gran presupuesto que aterrice en el catálogo el próximo 22 de diciembre. "Con una gran película de gran presupuesto creo que la gente empezará a ver el potencial de nuestra iniciativa de largometrajes originales", aseguró Sarandos. "Podría ejecutarse en la gran escala que tenemos en el mercado televisivo".
A ese estreno además le seguirá "Irishman", la película de gangsters dirigida por Martin Scorsese, que promete ser el gran bombazo del 2018 con un presupuesto de 100 millones de dólares. Esta cinta se une así a otras que ya forman parte del catálogo como "Death Note" o "Primero mataron a mi padre", la producción de Angelina Jolie. Para lograr ejecutar la nueva estrategia empresarial Netflix se gastará entre 7 mil y 8 mil millones de dólares, lo que supone 1 millón más de lo invertido el presente año. Sin embargo desde la plataforma aseguran que esto no está relacionado con la reciente subida de precios. "No hay correlación temporal entre nuestro intento de aumentar el contenido y la inversión, con el incremento de precios", aseguró el CEO financiero David Wells. "Esto fue planeado hace mucho tiempo".
Habrá que ver cómo afecta esto a los distintos acuerdos que tiene Netflix con las distribuidoras y si se termina resintiendo el catálogo por el lado opuesto. Disney ya demostró el efecto que tienen este tipo de políticas al decidir marcharse de la plataforma recientemente, y otras compañías podrían seguirle los pasos. Por el momento la industria del cine no parece demasiado contenta con la nueva dirección del servicio, y se muestra reacia a abrirle un hueco a esta nueva forma de hacer negocio.
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