La policía de Tulsa llevaba máscaras por miedo; ese sentimiento con el que Adrian Veidt había evitado el apocalipsis nuclear en 1985, y con el que el Séptimo de Kaballería estaba consagrando los planes del senador Keene. Ese trozo de tela para algunos supone un escudo, y para otros nada más que una distracción. Damon Lindelof no quiere asignar significantes a significados, prefiere quedarse en la ambigüedad. Lo que sin embargo sí ha hecho a lo largo de todo "Watchmen", según los intereses narrativos de cada momento, es esconder más de una identidad.
Siguiendo el formato de Alan Moore en el cómic, el showrunner disponía una narrativa fragmentada. Mientras en la serie se desarrollaba la trama principal, otras cuestiones menores se iban liberando tanto en el podcast oficial de la serie, como en la Peteypedia; un archivo digital en el que los Jeff Jensen y otros guionistas han ido colgando todo tipo de documentos adicionales a los episodios. Y es precisamente ahí donde se ha revelado esta semana la identidad real del Hombre Lubricante. ¿Te habías olvidado de él? Lindelof no quería dejar ese misterio del capítulo 4 sin resolver.
El informe final del archivo resulta no estar escrito por Dale Petey -como sí lo estaban el resto-, sino por un subdirector que se hace llamar Farragut. En él, este revela que Petey ya no forma parte del FBI, y aprovecha para descalificar los anteriores reportes calificándolos de "confusos y autoindulgentes". Dicho documento señala que gracias a un registro en la oficina del agente, se encontró "una jarra de lo que parece ser algún tipo de aceite de colza". Y va más allá: Petey "ha desaparecido", y "hay riesgo de que comience a actuar como Vigilante".
Sí, efectivamente ese joven de aspecto tímido, con grandes conocimientos sobre el pasado de los héroes, el origen de los Minutemen, y el resto del lore de Moore, era en sí mismo un justiciero. Ya en un reporte previo, el agente hacía mención a "un traje plateado recubierto con SPF-666" para prevenir de quemaduras. Por una vez los fans de Watchmen sí aciertan a destripar los planes de Lindelof. Tras semanas de sospechas y especulaciones, la identidad del Hombre Lubricante queda aclarada.
¿Aparecerá en la segunda temporada? Dejando claro que por el momento ni HBO ni el showrunner han confirmado el desarrollo de una continuación, existen varios hilos más que interesantes de los que tirar. Empezando por el destino del propio Petey, y siguiendo con la posibilidad de que Angela sea ahora la heredera de los poderes del Doctor Manhattan.
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