Nueva semana y nuevo episodio de "One Punch Man 2", que tiene por claro objetivo esta temporada conseguir que Garou florezca como un personaje icónico del anime. Durante la pasada semana veíamos al villano de moda poner en práctica todo el poder que había acumulado a lo largo de los años -hasta que se produjo un encuentro fugaz con Saitama-, algo que desafortunadamente no ha ocurrido en el episodio de 4, que sirve más de posicionamiento que de acción real.
Así pues, aquellos que esperaban que esta semana llegara una nueva muestra de la trepidante acción que poco a poco comenzaba a gobernar el ritmo del anime, deberán esperar pacientemente hasta dentro de 7 días. Curiosamente, el culpable de esto es ni más ni menos que el propio Garou, y es que a raíz de sus diversas acometidas contra héroes de toda clase y tipo, ha provocado que la Asocación se sitúe en un estado de alerta máxima por el que todo ejecutivo y héroe debe comenzar a limitar sus movimientos. Es precisamente gracias a este recurso que toma el plano uno de los personajes más carismáticos del anime, Bate Metálico, el cual ya se mostrara durante la primera temporada aunque sin ocasión de lucir en exceso. Por suerte, esto es algo que ha comenzado a cambiar.
Ciertamente, podríamos considerar que el protagonista de este episodio es ni más ni menos que el mencionado Bate Metálico, pues es sobre quien recae casi todo el peso del capítulo tanto a nivel de combate como de trama. De hecho, solo alguna que otra pequeña intervención de Saitama en forma de humor causa que Bate Metálico no se lleve casi todo el reconocimiento del que, posiblemente, se trate del episodio más flojo hasta la fecha de "One Punch Man 2". En cualquier caso, este nos sirve para observar cómo Bate Metálico es un héroe con un tremendo potencial que parece ser capaz de sobreponerse a todo tipo de situaciones de gran complejidad, tal y como demuestra ante el dúo de monstruos que ataca por sorpresa a sus protegidos. Aun así, será el capítulo 5 el que seguramente nos mostrará dónde se encuentran en la actualidad los límites de dicho personaje, pues mientras que a sus espaldas se halla un monstruo de amenaza dragón, ante sí llega Garou, el cual pretende seguir sumando víctimas a su historial.
Por otro lado, sería de esperar que Saitama comenzara a dar sus primeros pasos por un torneo que, con suerte, logrará dejarnos con una buena dosis de acción. Asimismo, resulta curioso conocer que el propio Garou ya acudió a dicho torneo justo un año antes para acabar proclamándose como el más poderoso del mismo sin realmente dificultad alguna. Al mismo tiempo, hay que destacar nuevamente lo absurdo y genial que fue el encuentro entre Saitama y Garou durante la pasada semana, pues una vez más observamos a nuestro protagonista repleto de dudas ante el nombre de Garou, el cual, por su parte, no recuerda absolutamente nada de lo ocurrido tras el contudente golpe de Saitama.
En un episodio un tanto lento y con poco de memorable -más allá de algún acción aislada de Bate Metálico-, vuelve a ser de interés el apunte sobre la psicología empleada por Garou a la hora de tratar a los monstruos como algo más que simples sacos de boxeo para los héroes. Esto es algo que le observamos haciendo de pequeño, y que a su vez coge fuerza ante los diversos testimonios de los monstruos de este episodio, que presentan relaciones de 'kouhai' y 'senpai', o lo que es lo mismo, una relación de superioridad y respeto entre el miembro más veterano y el más reciente. ¿Existen grandes diferencias entre héroes y villanos? Parece ser la pregunta que se nos quiere plantear, y es que como bien destaca Garou, ambos presentan sus propias ambiciones.
De este modo, podemos concluir que la aparición de Bate Metálico, con todo su carisma, no es suficiente en esta ocasión para cargar con todo el peso un capítulo que, principalmente, pretende posicionarnos de cara tanto al torneo de artes marciales como al nuevo enfrentamiento de Garou. Así pues, la próxima semana debería depararnos un espectáculo bastante mas interesante que el de la presente ocasión.