"Naruto Shippuden" es uno de los símbolos indiscutidos de la industria del anime. Siendo mi favorito personal, aunque he sido insistente con que soy un novato en el tópico, la adaptación de la obra de Kishimoto ha sido el motivo por el que he empezado a ver series animadas una vez más, y le guardo un cariño y afinidad difíciles de describir. Sin embargo, difícilmente permito que mi subjetividad me impida realizar el difícil intento de evaluar las cosas con objetividad, por lo que no puedo negar que la historia de Naruto y compañía, sobre todo en los tramos finales, tiene muchas aristas mejorables.
Específicamente, al menos para esta ocasión, quiero remitirme a un arco en particular de "Naruto Shippuden": la Cuarta Guerra Mundial Ninja. En el papel de ser ese magno desenlace de todas las aventuras que nuestro atolondrado protagonista ha pasado durante toda su vida ninja, hay un gran número de aspectos que, creo, podrían cambiarse para hacer de tales temporadas una experiencia más memorable. Por lo tanto, advirtiendo que habrá spoilers en todo el artículo, los invito a leer los 5 cambios que yo haría para mejorar el arco de la Cuarta Guerra Mundial Ninja de "Naruto Shippuden", del mismo modo que los exhorto a que hagan lo mismo en los comentarios.
Aunque no estoy tan de acuerdo con las críticas de que la aparición de Kaguya hizo que la saga cobrase un corte alienígena extremadamente fantasioso, pues tal adjetivo fácilmente se le puede atribuir a la serie en el momento en el que pasamos de kunais a bestias gigantes que expulsan energía al estilo de "Dragon Ball", sí coincido con que su aparición estuvo de más.
En lugar de tornarse como la antagonista principal, hubiese mantenido a Madara Uchiha como la más grande referencia del arco en términos de villanos de "Naruto Shippuden", a quien el Equipo 7 hubiese vencido de la misma forma en que se desarrolló la batalla final contra la Otsutsuki. Aun así, mantendría la línea argumental de que la totalidad de lo acontecido fue plan de Zetsu Negro (un giro de guion magnífico, si me preguntan), pero hubiese dotado a Madara del poder suficiente como para sobrellevar la traición, impedir el regreso de Kaguya e intentar vencer a Naruto y compañía por cuenta propia.
Durante el transcurso de la Cuarta Guerra Mundial Ninja de "Naruto Shippuden", el número de muertes relevantes e impactantes es tan reducido como breve. El fallecimiento de Neji Hyuga y los miembros del Cuartel General de la Alianza Shinobi (donde se encontraban Inoichi Yamanaka y Shikaku Nara) se desenvolvieron en el mismo capítulo, y conforman el desafortunado grupo de únicas bajas que han generado sensaciones en la comunidad. Una cifra indescriptiblemente baja y superficial para las magnitudes del contexto que se ceñía sobre ellas.
Por lo tanto, a consideración personal, la muerte de personajes como Gai, Oonoki, Tsunade, Hiashi, Yamato, Killer Bee, Kabuto e incluso ninjas del mítico Konoha 11 como Kiba o Tenten hubiese dotado de gran tragedia al arco, una emoción básicamente inexistente durante el desarrollo del mismo. Además, cada una de tales pérdidas debieran haber sido por motivos significativos y con trasfondos emocionales y traumáticos para sus allegados, y no siguiendo el trato que le dieron a la muerte de Neji.
Lo anterior, aun así, cuenta con un 'pero' importante: ¿cómo hubiesen muerto personajes de la índole de Temari, Kankuro, Shino o Rock Lee si la participación de estos en la Guerra fue nula? Salvo los segmentos en los que combaten con los esbirros del Juubi, el gran protagonismo de todo el arco final de "Naruto Shippuden" se distribuye entre los kages, Naruto, Sasuke, Kakashi y algún que otro luchador esporádico más, reduciendo la importancia del resto de la Alianza y desensibilizando a las personas de cualquier acontecimiento negativo que le pudiese pasar a esta.
Como consecuencia, el desarrollo de muchos personajes resulta más bien plano durante el transcurso de la guerra, y se acude a los episodios de relleno como alternativa pero, en cualquier caso, no satisface el vacío dejado por el exceso de protagonismo de los protagonistas, valga la redundancia. Por supuesto, la diferencia de nivel entre estos y el resto de combatientes es un imperativo factor a tomar en consideración, pero ese hubiese sido el elemento indispensable para dotar de lógica al regreso de una de las facetas más olvidadas de "Naruto Shippuden" en relación al "Naruto" original: las tácticas y las estrategias.
Independientemente de cualquier incongruencia surgida en torno al Edo Tensei, admito que los huecos argumentales de "Naruto Shippuden" no me parecen precisamente importantes ante la forma en que el jutsu prohibido fue abordado: hubo demasiadas resurrecciones, pero pocas fueron realmente destacables en términos de combates. Incluso, personajes como Deidara y Sasori quedaron relegados a menos que un segundo plano, cuando pudieron haber aprovechado sus respectivos regresos para, precisamente, cumplir con el punto anterior y dar más protagonismo a los personajes secundarios.
Aquí, no obstante, debo reconocer que la imagen destacada de este artículo es un bait, pues estoy de acuerdo con que Jiraiya no haya regresado mediante el Edo Tensei. Al final del día, el Sannin ya había culminado su historia de manera creíble y humana, por lo que devolverlo a la vida en "Naruto Shippuden" habría arruinado, parcialmente, lo impactante y doloroso de su muerte. Partiendo de esto, ¿imaginan cómo hubiese quedado Gai en el imaginario colectivo si hubiese fallecido? O, ¿qué tanto se hubiese reivindicado Kiba, de poca utilidad en toda la saga, con una muerte heroica? Quizá no al nivel de Jiraiya, pero sí mucho.
El arco de la Cuarta Guerra Mundial Ninja de "Naruto Shippuden" dura demasiados capítulos. Incluso obviando el relleno, el magno conflicto se ve extendido hasta cuotas absurdas más allá de que, dentro de los acontecimientos per se, tan solo transcurren unos cuantos días. Así, mientras los previos enfrentamientos bélicos en el mundo de "Naruto" habían durado años, esta nueva beligerancia culminó en cuestión de horas incluso a pesar de que, a diferencia de las guerras antecesoras, sí que estaba en juego la estabilidad del mundo entero.
Por lo tanto, extender la guerra en términos temporales habría dado un escenario más adecuado para cumplir con los tres puntos anteriores, traduciéndose simultáneamente en un mejor y más natural desarrollo de los personajes tanto en perspectivas y madurez como en habilidades; no habría poderes tan súbitos e inesperados porque no habría necesidad de ello, ya que Naruto, Sasuke y los demás tendrían más tiempo para mejorar sus habilidades ante Madara. En paralelo, la crudeza de la guerra de "Naruto Shippuden" habría sido más palpable, y eventos como los 40.000 shinobis que murieron en el primer día hubiesen sido más impactantes.
No obstante, todo esto es tan solo la opinión de un outsider del anime que, sinceramente, poco o nada maneja de guiones o de world-building. Por lo tanto, aprovecho para instar al debate y preguntarles a ustedes: ¿cambiarían el arco de la Cuarta Guerra Mundial Ninja de "Naruto Shippuden"? O, en su defecto, ¿creen que está escrito acordemente y que no necesita variaciones mayores? Deja tu respuesta en los comentarios.
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