Reivindicación femenina, cierre a Hollywood, y denuncias en abierto. La última edición del Festival de Cannes cerró sus puertas el pasado 19 de mayo en uno de los años más atípicos para el evento. La prohibición de los selfies en la alfombra roja por parte de Thierry Frémaux, y la salida de Netflix bien atrajeron gran parte de la atención durante los primeros días, pero el cine se abrió paso con un repertorio de propuestas que muchos críticos no dudaron en alabar. Los últimos años la calidad había descendido, y aunque este año muchas de las premiadas no hacen sentir las tendencias más candentes del festival, sí devuelven a Francia la primera plana mundial.
La industria norteamericana se quejó de tener solo a dos representantes, pero finalmente no se fue con las manos vacías. Spike Lee supo corresponder con su popularidad haciéndose con el gran premio del jurado por la incendiaria "BlacKkKsman", un mensaje directo contra el racismo de Donald Trump. Más sorpresa generó la Palma de Oro especial que se llevó Jean-Luc Godard por su película "Le livre d'image", un reconocimiento a toda su carrera que posteriormente agradecería con una rueda de prensa vía FaceTime. Sin embargo, la noche tenía nombre y apellidos. El japonés Kore-eda Hirokazu, se llevó el premio gordo con "Shoplifters", una oda a el amor y la familia por encima de los lazos de sangre.
Este año tampoco faltó la polémica con el siempre irreverente Lars Von Trier, quien en esta ocasión volvía a generar enfados entre el público por "The House That Jack Built", y por algunos de los discursos de la gala. La italiana Asia Argento no dudó en denunciar una violación de Harvey Weinstein producida en el propio festival años atrás, la libanesa Nadine Labaki aprovechó el momento para lanzar un mensaje político con tintes críticos, y la iraní Nader Saeivar no dudó en denunciar las prácticas de su país. A pesar de las denuncias, Cannes todavía tiene un largo camino que recorrer en materia de igualdad (de las 21 películas a concurso, solo tres estaban dirigidas por mujeres). Por lo pronto el asunto de la calidad cinematográfica va mejorando.
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