"Dragon Ball Super" fue un anime un tanto irregular. Sus inicios, olvidables para muchos fans, marcaron un camino ascendente en la calidad tanto de la animación como de los guiones que terminó desembocando en ese espectacular final del mes pasado. Parte de este cambio vino derivado del nuevo equipo de animadores que fue reuniendo Toei Animation tras escuchar las críticas de los primeros episodios. Pero lo que realmente generó esa mejoría y fluidez, fue la ampliación de los frames; los dibujos en estático que tiene cada episodio, y que son posteriormente reproducidos a altas velocidades para generar el efecto de movimiento.
Tu Yong-ce, uno de los miembros del equipo de producción de "Dragon Ball Super" ha decidido ahora romper el silencio (vía Ajay/Mr Kaytos) con la comprometida regla de trabajo que tenía el estudio a la hora de animar los episodios. Ce se percató de la limitación de frames en el anime cuando se pasó a "One Piece". "Mi reacción al unirme al nuevo equipo y echar un vistazo a los storyboards fue: 'Quiero esto y esto. ¡Quiero probarlo todo!'", explica en relación a la serie de los piratas. Muy diferente a lo que vivió con Goku. "Mi reacción al unirme al equipo de Dragon Ball y mirar los storyboards fue '¿Cómo puedo dibujar esto y esto otro? ¿Cómo puedo dibujar sin una referencia?' Para ser sincero aunque disfruto viendo Dragon Ball, no lo hago tanto cuando se trata de dibujarlo".
Los animes por regla general suelen tener una media de 3000-4000 frames por episodio. "Dragon Ball Super" comenzó con unos 3.500 frames, y finalizó la saga del Torneo de Poder con 4.500. Este incremento fue el principal responsable de la mejoría en la animación, aunque no se debió a el poder económico de la compañía. "Pregunté al director por qué era tan restringido el número de frames, teniendo en cuenta que Toei tiene tanto dinero", narra Yong-ce. "El productor me dijo que la restricciones eran severas porque de lo contrario ¿cómo iban a tener tan buen ambiente laboral?".
Normalmente los animadores se sienten menos presionados con un menos número de frames por episodio, ya que esto supone una menor carga de trabajo. Y eso es precisamente lo que resalta el productor del estudio. No obstante, es bien conocido el apretado calendario que tenía el equipo de "Dragon Ball Super", y el poco tiempo que pasaba entre la producción de un episodio y otro. Parece más que Toei buscaba reducir gastos ante un anime que podría prolongarse durante mucho tiempo.
Con "One Piece", uno de los shonen más largos de la historia, el estudio utiliza unos 3.000 a 4.000 frames. Una cifra que encaja con lo que empleaba la serie de Toriyama en sus inicios. ¿Sospechoso? Es posible que existieran motivos económicos, pero eso no reduce la distancia de calidad con otras franquicias como "My Hero Academia", la cual llegó a ostentar hasta 8.000 frames en su primer episodio.
CONTENIDO RELACIONADO
A pesar del escepticismo, este primer avance es bastante prometedor
Un viaje entre mundos reales y virtuales que se espera como uno de los mayores lanzamientos de 2025
La esperada secuela ya ha roto un récord importante de Ridley Scott a pesar de su escaso tiempo en taquilla
En su lugar se anuncia que se estrenará Ice Age 6
El gran éxito de Illumination de 2023 ya se puede ver sin coste adicional
'Aprender a soltar', el drama familiar sueco que lo está petando en Netflix España