Sin saber muy bien cómo, 'Bluey' se ha convertido en la serie infantil de animación mejor valorada de la historia. Un fenómeno que no entiende de edades porque personas de diferentes generaciones se divierten con este proyecto australiano que ya va por su tercera temporada y que recientemente ha estrenado su primer 'largometraje' (30 minutos en lugar de 7 minutos que dura cada capítulo).
Ahora bien, 'Bluey' es una moda por muy buena serie que sea y no conviene olvidar que antes de esta ficción que se emite a través de Disney+ y Disney Junior hay otras ficciones para los más peques de la casa que no recibieron la misma atención. En este caso os presento a 'Puffin Rock', una serie de Netflix que fue nominada a mejor producción animada preescolar para TV en los Premios Annie (ganó 'Tumble Leaf') y que se estrenó en 2015 sin prácticamente hacer ruido. Sí, fue un fracaso, pero 9 años después, sigue siendo tan fresca como entonces.
Ante todo, que quede claro que 'Puffin Rock' es anterior a 'Bluey', por lo que cualquier parecido entre ambas es pura coincidencia... O bien 'Bluey' se ha inspirado en la primera. En cualquier caso, 'Puffin Rock' consta de dos únicas temporadas de 13 capítulos cada una y narra la historia de la pequeña frailecilla Oona, su hermano bebé Baba y sus amigos, quienes comparten aventuras en Roca Frailecillo, un espacio en el que aprenden sobre la naturaleza, la amistad y la familia.
Ten en cuenta que 'Puffin Rock' es una serie dirigida a los más peques de la casa, por lo que si eres adulto y no tienes alma infantil, probablemente te aburrirás como una ostra. Además, considero que 'Puffin Rock' es aún más 'infantil' que 'Bluey', serie en la que puede haber algunos mensajes que puedan ser interpretados de otra forma por un público adulto, sobre todo mensajes con un importante calado social.
Entonces... ¿Dónde está el parecido entre 'Bluey' y 'Puffin Rock'? Principalmente en la estética. Son serie bastante similares en cuanto a apartado artístico, además de compartir situaciones y personajes de forma superficial. Igualmente, esto es algo que pasa habitualmente en las series dirigidas a un público preescolar: son proyectos muy limitados tanto por formato como por lenguaje, y quizás por ello 'Bluey' ha triunfado tanto y 'Puffin Rock' no. La primera es mucho más innovadora y se abre a una audiencia mayor, mientras que la segunda sigue siendo una serie eminentemente educativa.
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