ATENCIÓN: El artículo es una opinión puramente subjetiva y contiene SPOILERS de El Libro de Boba Fett
Vamos a ver, vamos a ver, vamos a ver. ¿Qué locura hemos visto en el sexto capítulo de El Libro de Boba Fett? Dave Filoni no defrauda, eso está claro. Se ha marcado uno de los episodios más bestias en la historia de Star Wars. Tampoco estuvo nada mal el anterior, dirigido por Bryce Dallas Howard. Ambos son los dos mejores capítulos en lo que va de serie (con permiso del segundo, que es fantástico). ¿Y qué tienen estos dos en común? Exacto, que el protagonista es cualquiera menos Boba Fett. Mando, Grogu, Luke... incluso Cobb Vanth. Todos menos el personaje de Temuera Morrison.
La verdad es que el quinto episodio de "El Libro de Boba Fett" nos dejó a todos un poco descolocados. Esperábamos el regreso de Mando pero no que se le fuera a dar el control absoluto del capítulo. Boba ni siquiera aparece en todo el metraje. Fue una decisión rara, pero tenía su pase. La serie estaba desinflándose por momentos y es Mando, que siempre está bien. El cambio de aires funcionó a la perfección aunque expuso lo que ya todos sabíamos, que este producto Star Wars estaba muy lejos de "The Mandalorian". La idea que seguían desde la productora parecía evidente. Igual que Boba ayudó a Mando en su segunda temporada y la serie ganó enteros, repetimos la estrategia pero a la inversa. Genial.
Pero cuál ha sido nuestra sorpresa cuando, en el sexto capítulo, "El Libro de Boba Fett" ha vuelto a dejar relegado al ostracismo a su personaje principal. Hasta los droides que están construyendo el Templo Escuela de Luke tienen más protagonismo que él, que apenas aparece un minuto. Y ya van dos episodios de seis, es decir, una tercera parte. En mi vida había visto algo así con un protagonista. No me entendáis mal, como fan de Star Wars estoy eternamente agradecido por estos dos episodios, especialmente por el sexto. Pero también duele mucho ver que un personaje que ha sido una leyenda durante tantas décadas está siendo tan maltratado. Y más en el que debía ser su gran renacer.
Porque no perdamos el foco. Toda la comunidad galáctica llevaba muchos años pidiendo que Boba Fett diera un paso al frente. Estuvimos a punto con el cancelado videojuego 1313 (que por otro lado habría sido genial que adaptaran como serie). Y cuando por fin nos premian y producen "El Libro de Boba Fett", resulta que es una serie que empieza bien pero que va clarísimamente de más a menos y Boba directamente no pinta nada en buena parte de la historia. ¿De verdad merecía la pena traerlo de vuelta para tratarlo así? Es un patinazo importante en el desarrollo del antihéroe, que podría haberse quedado como estaba y seguir en la cumbre de los personajes de Star Wars con ese aura de misterio y frialdad que le rodeaba. Y con el casco puesto, para variar.
Sea como sea, lo cierto es que la serie aún no ha terminado. Y aunque es muy difícil que corrijan el regusto agridulce que nos ha quedado a todos los que buscábamos algo más en "El Libro de Boba Fett", la entrada en escena de todos los nuevos (y viejos) personajes ha conseguido que, como producción, sí haya resurgido de sus cenizas. A lo grande. No hay más que meterse a Twitter y comparar el escaso debate que había entre las primeras semanas y el que hay ahora. Un abismo. Y qué queréis que os diga, yo estoy con el hype por las nubes de cara a este cierre de temporada el próximo miércoles. Ojalá Boba Fett termine cayendo de pie.
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